Tras la separación de Gerard Piqué, adquiere relevancia la mansión de su excompañera Shakira en Miami.

Su precio de quince millones de euros o su alquiler de 40.000 euros a la semana resultan triviales por comparación con Mallorca, pero por fuerza ha de fascinarnos que el rincón más privado de la cantante esté íntegramente recubierto por roba de llengües, según se demuestra en la foto de Douglas Elimann.

La mejor promoción de la isla.