Alrededor de 1 millón de personas en España toman anticoagulantes. Hablamos de unos medicamentos, prescritos bajo tratamiento médico, que evitan o retrasan el tiempo de coagulación de la sangre, haciéndola más líquida, para prevenir la formación de coágulos y su circulación por el torrente sanguíneo. 

Los instrumentos y medicamentos que tiene que usar una persona con diabetes tipo 1. EPC

Estos fármacos están destinados a aquellas personas que padecen:

  • Determinadas enfermedades del corazón o de los vasos sanguíneos. 
  • A pacientes que sufren fibrilación auricular.
  • Aquellos a los que se les ha sometido a una cirugía para reemplazar una válvula cardíaca.
  • Pacientes que han sufrido trombosis.
  • Si se tienen defectos cardíacos congénitos
  • Si se porta el anticuerpo antifosfolípido.
  • Y también para prevenir la aparición de trombos tras una cirugía. 

Tipos de anticoagulantes 

A la hora de reducir la coagulación de la sangre en estos pacientes existen diferentes tipos de anticoagulantes.

1 - El probablemente más conocido sea el Sintrom, perteneciente al grupo de anticoagulantes denominados como antivitamina K. Es un anticoagulante oral muy eficaz pero su administración conlleva algunas desventajas.

  • Por ejemplo, no se puede administrar con una dosis fija, sino que se debe modificar cada muy poco tiempo (semanas) para ajustar la dosis y evitar problemas graves como hemorragias o coágulos. 
  • Además, los pacientes que utilizan este tipo de anticoagulante deben reducir la ingesta de determinados alimentos que son ricos en vitamina k, que favorece la coagulación. Alimentos como el brócoli, las coles de Bruselas o las espinacas.

Un 50% de los pacientes anticoagulados están mal controlados. UNSPLASH

2 - Otra categoría de anticoagulantes son los inyectables, la conocida heparina

3 - Y, por último, hace relativamente poco aparecieron los anticoagulantes orales de acción directa (ACOD), muy utilizados para la prevención de ictus o embolias sistémicas en la mayoría de los pacientes con fibrilación auricular. 

Se trata de unos fármacos muy eficaces y su administración supone menos controles ya que la dosis es fija y no se ve afectado por el tipo de alimentos que toma el paciente.