Quemar grasa en el abdomen, en los brazos, en las piernas... Perder cinco kilos en cinco días, adelgazar 10 kilos en diez días...

Son preguntas y búsquedas en Google muy comunes, sobre todo en esta época del año, cuando tanto mujeres como hombres, buscan lucir su mejor versión física para el verano. Pero...

¿Es realmente posible quemar grasa localizada?

La respuesta sencilla es no: la actividad de un músculo específico no garantiza la pérdida de grasa de esa zona, según un estudio de la Asociación Americana de Salud, Educación Física y Recreación.

Tal y como ha explicado el entrenador Mario Felix Pantoja, coach de Reto 48, en Women'sHealth no es posible quemar grasa localizada porque "el cuerpo es una unidad funcional, entender todo en su conjunto, al ejercitarnos el gasto calórico se aplicara a todo nuestro organismo".

De hecho, Mario define el entrenamiento ideal para quemar grasa: la combinación de ejercicio cardiovascular moderado con una frecuenta de entrenamiento de 3/3 días de trabajo generalizado. Es más, el entrenador insiste en la importancia de "saber que ciertos factores como la genética, los antecedentes familiares, patologías, composición corporal, entre otros, son determinantes".

De hecho, aclara que su trabajo como entrenador es "mejorar los hábitos cotidianos como hacer ejercicio, cambiar la alimentación adaptándola a estos factores e incluso descansar nuestras horas correspondientes nos ayudaran a perder esa grasa acumulada".

La gran mayoría de evidencia científica, que se remonta a los años 70, muestra que reducir la grasa en puntos localizados del cuerpo no es posible y que se da de forma generalizada y no en la parte concreta que uno desea.

Elena Perry, Investigadora de moléculas bioactivas del California Institute of Technology explica para la revista Yale Scientific Magazine que la pérdida de grasa no se consigue ejercitando zonas concretas de cuerpo, sino que se produce gracias al déficit calórico: “Hacer 100 abdominales al día puede fortalecer tus abdominales, pero probablemente no los hará más visibles a menos que también tomes otras medidas para reducir la grasa corporal en general”, afirma.

Perry, explica cómo se produce la descomposición de grasa en el cuerpo al hacer ejercicio: “Hay algunas razones fisiológicas básicas por las que la pérdida de grasa dirigida no funciona: la grasa contenida en las células grasas existe en una forma conocida como triglicéridos. Sin embargo, las células musculares no pueden usar directamente los triglicéridos como combustible". 

"En cambio, la grasa debe descomponerse en glicerol y ácidos grasos libres, que luego ingresan al torrente sanguíneo. Como resultado, la grasa descompuesta para ser utilizada como combustible durante el ejercicio prolongado puede provenir de cualquier parte del cuerpo, no solo de la parte que más se trabaja”, concluye.