La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) publicó el pasado miércoles la 12ª actualización sobre los efectos secundarios de las vacunas contra el coronavirus entre los que se han encontrado la parestesia y la mielitis transversa.

En este informe se realiza un balance sobre la cantidad de vacunas que se han suministrado a los diferentes grupos de la población y los efectos adversos que se han notificado a causa de las mismas. En él se destaca que, desde el momento en que se comenzó la campaña de vacunación hasta el 9 de enero de 2022, se han suministrado en España 80.109.445 dosis a 40.263.471 personas, lo que supone, aproximadamente, un 85% de la población. De ellos, el 68% se vacunaron con Pfizer, el 18% con Moderna, el 12% con AstraZeneca y el 2% con Janssen según el registro de Vacunación del Ministerio de Sanidad.

Hasta el 9 de enero de 2022, los diez efectos secundarios más comunes de Pfizer son la pirexia, la cefalea, la mialgia, dolor en la zona de vacunación, malestar, fatiga, linfadenopatía, náuseas, astenia y escalofríos. La mayoría son reacciones transitorias que desaparecen en los primeros días tras la vacunación.

Nuevo efecto secundario: la mielitis transversa

Tanto con AstraZeneca como con Janssen se ha identificado la mielitis transversa como reacción adversa. Es una inflamación que afecta a la médula espinal en toda su anchura (transversalmente), bloqueando la transmisión de los impulsos nerviosos que entran o salen de la médula espinal. Las personas que lo padecen sufren dolor de espalda y una banda de tirantez alrededor de la zona del cuerpo que esté afectada como el tórax o el abdomen aunque también pueden experimentar dolor en la cabeza o en el cuello. En un periodo de entre horas y días se desarrolla hormigueo, entumecimiento y debilidad muscular en los pies, extendiéndose hacia arriba. Existe también, dificultad al orinar o incluso urgencia urinaria. Los síntomas empeoran durante el paso de los días dando lugar a parálisis, pérdida de sensibilidad, retención urinaria y pérdida del control de la vejiga y del intestino.

Al rededor de un tercio de las personas se recupera, un tercio continúa con cierto grado de debilidad muscular y problemas urinarios y otro tercio se recupera de forma leve permaneciendo en una silla de ruedas o en la cama.

En España no se ha registrado ninguna notificación de mielitis transversa tras la administración de la vacuna aunque han sido notificados 13 casos a nivel mundial por lo que "no se puede descartar una relación causal de mielitis transversa tras la administración de esta vacuna".

Síndrome de trombosis con trombocitopenia

Por otro lado, también han detectado, en ambas vacunas, el síndrome de trombosis con trombocitopenia, la mayor parte de los casos tras la primera dosis de la vacuna en el caso de AstraZeneca. De los de los 1.809 casos notificados mundialmente, 1.643 se notificaron con la primera dosis y 166 con la segunda. Este síndrome se produce en forma de coágulo de sangre en una o más venas profundas del cuerpo, generalmente en las piernas, causando dolor, o hinchazón, aunque puede ser asintomático. La trombosis puede ser grave si los coágulos sanguíneos se desplazan a los pulmones, provocando una embolia pulmonar. Además, se le añade la trombocitopenia, una afección en la que el organismo cuenta con pocas plaquetas por lo que dificulta la coagulación. En Janssen, concretamente, se ha concluido que la diferencia de casos notificados entre sexos parece menor de lo que se había observado inicialmente. Los casos ocurrieron principalmente en las tres primeras semanas tras la vacunación y sobre todo en personas de menos de 60 años.

La parestesia de Moderna

También se ha detectado un nuevo efecto adverso en moderna, la parestesia: una sensación de quemadura o pinchazos que se suele sentir en las manos, brazos, piernas o pies y, a veces, en otras partes del cuerpo, que se presenta sin previo aviso y por lo general no causa dolor, sino que se describe como un hormigueo o adormecimiento.