Javier Aguirre no es de arremeter contra los árbitros. Se cuestiona cosas, se pregunta por qué a veces, "ante una misma jugada, algunos muestran tarjeta amarilla y otros roja" o por qué "el VAR, a veces entra en una jugada y en otras no", pero siempre acaba llegando a la misma conclusión: "En el cómputo global, la fortuna y el arbitraje se equilibran".

Y eso que no fue un partido sencillo para el técnico mexicano, quien fue expulsado en los últimos instantes y tuvo que acabar viendo el partido desde el vestuario: "La realidad es que no aprendo de los errores. Ante el Sevilla me salí del área técnica y me mostraron amarilla, hoy, sin embargo, hice lo mismo y me mostraron roja. No levanté los brazos, no insulté a nadie. Es verdad que infringí el reglamento y merezco una sanción, de la cuál desconozco las consecuencias. Estaba viviendo un partido muy tranquilo, la verdad, pero desconozco por qué, una misma acción, en ocasiones se sanciona con una tarjeta de color amarilla y otras veces con roja".

Además de la expulsión de Aguirre, Maffeo también vio la roja directa en los últimos instantes de un encuentro complicado para el lateral diestro: "Maffeo durante un entrenamiento esta semana sufrió un golpe un poco feo y parece que recayó de esa misma lesión durante el partido. Me pidió salir y luego fue expulsado por algo que debió escuchar el cuarto arbitro".

Cuestionado por el penalti de Oliván sobre Ángel, Aguirre habló "del déjà vu de siempre": "La jugada la ve el arbitro, la juzga y la manda a córner. Volvemos al mismo deja vú de siempre. ¿El VAR qué hace? ¿Le llama o no le llama? ¿Quién decide el VAR? El otro día en San Sebastián estuvo hasta un minuto insistiéndole para que fuera a revisar la jugada y hoy, en cambio, ni dos segundos".  

Pese al buen arranque que protagonizó el Mallorca en el segundo periodo, Aguirre reconoció que a veces los partidos son inexplicables, "como inexplicable fue el tanto que ellos anotan". "Es verdad que hicieron méritos para empatar. Es más, en la primera parte creo que ellos jugaron mejor que nosotros y no pudimos ser lo profundo que nos hubiera gustado en el último tercio. Al final llevamos una rachita buena, pero siempre digo que, ni el árbitro ni la suerte entrenan conmigo", destacó el entrenador bermellón.

El 'Vasco' quiso destacar, para acabar, el encuentro de Baba: "Hizo un encuentro extraordinario, la verdad es que fue espectacular, estuvo muy seguro con la pelota y muy bien con los controles. Estoy muy contento por él".