Alfonso Díaz, en nombre del Real Mallorca, ha pedido perdón. Lo ha hecho reiteradamente, disculpándose por el mal servicio que se ofreció el pasado sábado en Son Moix y asegurando que el club solicitó "en numerosas ocasiones y desde hace más de un mes" un cambio de horario del partido que finalmente no se produjo. "La relación que tenemos con LaLiga es buena, pero en este caso en concreto, solicitamos en varias ocasiones el cambio de horario, pero fueron inflexibles", ha aclarado.

Sobre el mal servicio de bar que se ofreció durante el encuentro frente al Girona, el CEO de Negocio ha asumido responsabilidades y ha reconocido que "faltaron 40 trabajadores" para cubrir las necesidades de los aficionados. "Evidentemente hay circunstancias que no son aceptables. Pido disculpas por lo que pasó el otro día a nivel de comida y bebida, pero hemos contratado una empresa nueva y están en proceso de adaptación. Estamos trabajando para que esto no vuelva a ocurrir. Si el otro día, en la Grada Este, había cuatro bares, y el próximo partido habrá once", ha resumido.

Alfonso Díaz ha incidido en resaltar la buena relación que existe entre el club con la patronal que dirige Javier Tebas, pero ha reconocido que no siempre todas las peticiones que se realizan desde la entidad bermellona son factibles. "Nosotros como club siempre pensamos en nuestra afición y defendemos sus intereses siempre. En este caso en concreto, en varias ocasiones solicitamos a LaLiga cambiar el horario y fueron inflexibles. El partido tenía que disputarse bajo esas circunstancias, no quedaba otra. Incluso para el espectáculo no es bueno. Ante esto solo podemos seguir mostrando nuestra inconformidad. No trabajamos con presiones públicas ni con comunicados, trabajamos con las personas pertinentes, ese es nuestro día a día. Creemos que el club está avanzando y vamos por el buen camino, pero evidentemente hay circunstancias que no son aceptables", ha resaltado.

El CEO Alfonso Díaz, a su llegada a la sala de prensa del estadio bermellón. E.G.

Sobre la posibilidad de que LaLiga cambie el horario del partido frente al Almería, previsto también a las 14 horas en Son Moix dentro de dos jornadas, Alfonso ha aclarado que el Mallorca ha vuelto a solicitar un cambio de horario, explicando las circunstancias que se dieron en el partido frente al Girona: "Ya les hemos puesto en alerta para que la situación no se vuelva a repetir, pero habrá que ver que previsiones de temperatura hay para esas fechas". Díaz también ha querido aclarar que "el patrocinador principal -la empresa japonesa AlphaGel- no ha exigido en ningún momento jugar partidos a las 14 horas, pero hay oportunidades de mercado que están ahí", haciendo referencia al tirón mediático que tiene Kang In Lee en Corea.  

El máximo dirigente de la entidad también ha querido aclarar lo acontecido el pasado domingo en Son Bibiloni, en el estreno del filial mallorquinista frente al Hércules y donde los asistentes tampoco pudieron comprar agua ni alimentos debido a que el chiringuito de la Ciudad Deportiva estaba cerrado. Díaz ha aclarado que el Mallorca no solicitó un cambio de horario a la Federación, por lo que el partido se disputó a las 12 del mediodía: "No se solicitó el cambio, eso es así. En cuanto al chinringuito, que estuviera cerrado fue debido a un problema interno de comunicación y no volverá a pasar. Es la primera vez que ocurre y pido disculpas porque, evidentemente, no se puede volver a producir".

El CEO de Negocio, que ha acaparado casi todo el protagonismo en la rueda de prensa en la que también estaba presente el director deportivo Pablo Ortells, ha señalado que la intención del club era que las obras de la Grada Este "estuvieran acabadas" antes del inicio del campeonato, sin embargo no ha sido posible debido al "retraso de suministros" para realizar las cerchas que sujetarán la nueva visera de la zona. Díaz ha asegurado que espera que "para el partido frente al Barça", las obras de la fase 1 de la remodelación del estadio "ya estén acabadas".

El directivo madrileño ha querido reiterar en numerosas ocasiones el "peso que tiene la afición" para el club y ha reconocido que "sin ellos no hay fútbol". "Sin esta afición que viene al campo no habría espectáculo. Nosotros trabajamos por defender siempre sus intereses, que no le quepa ninguna duda a nadie. Pedimos disculpas por lo que ha pasado, pero el tema de la comida y la bebida ha sido algo puntual, no es una cosa que como norma se esté produciendo, y trabajaremos para que no vuelva a ocurrir", ha zanjado.