Lograr la primera victoria en casa, mantener la seguridad defensiva de las tres primeras jornadas y combatir el fuerte calor. El Mallorca se planta este mediodía en Son Moix (14 horas/Movistar) ante un Girona que quiere comenzar a sumar lejos de su campo. Los bermellones, crecidos en lo anímico tras el importante triunfo en Vallecas frente al Rayo Vallecano (0-2), buscarán continuar por el mismo camino y brindar a sus aficionados los primeros tres puntos del curso en casa
Para lograrlo, tanto los jugadores que estén en el césped como los aficionados que estarán en las gradas, deberán luchar contra el insoportable calor y humedad que reinarán en el feudo bermellón. Porque el horario impuesto por la Liga, las dos de la tarde, cuando apenas acaba de terminar de agosto, es de todo menos favorecedor para el espectáculo.
El club, que ayer mostró de manera tibia su malestar en boca del técnico Javier Aguirre, informó de que repartirá gorras gratuitas para los aficionados situados en la grada Sitjar y la Tribuna Este y que el precio de las botellas de agua en todo el recinto será de tan solo un euro.
Porque el calor, como ya ocurriera el curso pasado, será un factor determinante en lo que ocurra durante el encuentro. Aguirre, que habrá impregnado a sus jugadores de la importancia de empezar a sumar de tres en casa y además ante un rival directo por la permanencia, repetirá la misma fórmula que en las tres jornadas anteriores. Falta por ver si el equipo dará un paso adelante buscando ser más protagonista en el juego en un partido de los que se apuntan como victoria imprescindible al ver el calendario.
Los últimos refuerzos –Tino Kadewere y Matija Nastasic–, que estarán en el banquillo salvo novedad, todavía tienen que ganarse su sitio en un once que poco a poco va mejorando y que quiere igualar la misma puntuación –siete puntos– que llevaba el grupo comandado por Luis García al paso por la jornada cuatro.
Rajkovic, que todavía no sabe lo que es encajar un gol que no llegue de penalti, seguirá bajo palos. Maffeo, Valjent, Raíllo, Copete y Costa formarán la defensa, con Battaglia, Grenier y Dani en la sala de máquinas. Arriba, Muriqi, con dos goles, y Kang, con uno, serán los encargados de transformar las ocasiones.
Enfrente, un Girona al que se mide el Mallorca por primera vez en su historia en Primera División. Los de Míchel, uno de los tres equipos que ascendieron el curso pasado, quieren olvidar la derrota ante el Celta (0-1) y recuperar las sensaciones que mostraron en la goleada frente al Getafe (3-1).
Lo tendrán que hacer, sin embargo, sin su jugador franquicia y máximo goleador Cristhian Stuani. El delantero uruguayo, un referente en el conjunto catalán, será baja durante un mes tras detectarle los servicios médicos una arritmia benigna. Futbolistas como el Taty Castellanos o el recién incorporado Manu Vallejo deberán tomar la responsabilidad ofensiva en su lugar.
