El Mallorca de la temporada 2022/2023 ya tiene cara y ojos. El cierre del mercado de verano deja a una plantilla con pocas novedades respecto a la que logró la permanencia en la última jornada, aunque se ha logrado la continuidad de jugadores que el técnico Javier Aguirre considera claves. El portero Rajkovic, los centrales Copete y Nastasic y el delantero Kadewere no estaban la temporada anterior y están llamados a ser importantes en la que acaba de empezar, aunque la dirección deportiva que lidera Pablo Ortells también considera fichajes a Muriqi, Battaglia, Maffeo y Grenier, que sí estaban pero que no eran propiedad de la entidad hasta este verano.
Lago, que militó en el Huesca desde enero, y Cufré, que estuvo cedido en el Málaga, también de Segunda División, se quedan a pesar de que a principios de la pretemporada todo apuntaba a que volverían a salir. El hecho de que Aguirre apueste por un sistema de cinco defensas ha obligado a aumentar la nómina de centrales, por lo que Copete y Nastasic se unen a Raíllo, Valjent, Russo y el canterano Gayà, que ya estaban. En este dibujo cobran mucha importancia los carrileros, con Maffeo y Gio por la derecha, y Costa y Cufré por la izquierda.
En una plantilla sin apenas extremos, ya que apenas cuenta con el propio Lago, el ahora lesionado Amath y Javi Llabrés, los bermellones disponen de dos pivotes defensivos, como Battaglia y Baba, más otros creativos, como Grenier y Galarreta y otros con más llegada, como Dani Rodríguez y Antonio Sánchez. A partir de ahí, la polivalencia de varios jugadores en el ataque puede combinar múltiples opciones. Kang In Lee puede actuar como segundo delantero o como mediapunta, incluso Kadewere o Ángel pueden ser los acompañantes del ‘nueve’ de referencia, Muriqi o Abdón.
