Javier Aguirre, entrenador del Real Mallorca, compareció en rueda de prensa con un semblante muy diferente al de las dos últimas ocasiones. «Al menos podremos dormir», indicó en tono jocoso, al ser cuestionado por lo que supone este punto para el equipo: «La verdad es que sobre todo es un punto muy bueno en lo anímico, pero insuficiente para la tabla».

«Veníamos de una tarde desastrosa ante el Granada y la verdad es que hoy esperábamos que nos pudieran volver a vapulear, pero el equipo ha dado la cara», se congratuló el preparador rojillo. «Sufrimos mucho, vaya si sufrimos, pero esa mano de Manolo valió la pena. Hace cuatro días nos pasaron por encima, pero hoy estamos ahí otra vez. Quedan dos finales más y habrá que jugar más intensos y ganar los dos próximos partidos», reflexionó.

Cuestionado por el gran papel de Manolo Reina durante el encuentro, Aguirre restó importancia al cambio de portero bajo palos. «Es el único jugador que todavía no había tenido minutos conmigo, pero ha habido también más cambios en el once. Tengo 23 jugadores en el plantel y lógicamente a veces me toca ser injusto con algunos futbolistas. Hoy le ha tocado a Baba, por ejemplo. Lo de Manolo ha salido bien a juzgar por el resultado», admitió.

«Todos los jugadores de este equipo tienen su personalidad y estilo y aportan sus cosas, menos Kubo, que no sabe gritar (bromeó). Evidentemente Manolo nos da muchas cosas. Siempre tiene necesidad de contagiar su alegría, de demostrar su estado de ánimo. El hombre, como Salva Sevilla o Raíllo, tiene ya muchas batallas en esto del fútbol. Han estado en Segunda B y saben de qué va esto», relató sobre el papel del malagueño.

Aguirre se sinceró también sobre la situación del equipo. «Si os digo la verdad estos días han sido durísimos. Os comenté que el estado de ánimo estaba recuperado, pero han sido noches muy largas y jodidas y de darle muchas vueltas a las cosas. Cómo te explicas que en el partido más importante de la temporada te pase eso. Había que mostrar otra cara ante el Sevilla, carajo, y se ha hecho», zanjó.