El partido Unides Podem de Alcúdia ha reclamado la incoación de un expediente informativo para “aclarar” los hechos ocurridos en la madrugada del pasado día 13 de abril en la carpa donde se celebraba la Fira de la Sípia. Según apuntan, “la intervención de la policía municipal de Alcúdia acabó con dos jóvenes detenidos y otros con lesiones por porrazos y la utilización de gas pimienta”. “Una vez vistos los vídeos y las imágenes, consideramos que la actuación de la policía local contra un grupo de jóvenes del pueblo fue totalmente abusiva y desproporcionada. En ningún momento se ha pedido a estos jóvenes que expliquen su versión de los hechos, y en todo caso el Ayuntamiento ha asumido el relato de la policía local de Alcúdia de que 7 jóvenes estaban agredido a una persona y que después también agredieron a la propia policía”, explica el partido.

Podem recuerda que la policía local es competencia del concejal Juan Sendín de Vox, y que Jorge Campos, diputado de este partido de extrema derecha, declaraba su apoyo a Sendín con estas palabras para justificar la intervención policial: “conocidos miembros de la extrema izquierda de Alcudia. Gentuza violenta que no tiene cabida en nuestra sociedad”. Según Podem, el silencio de Sendín avala el contenido de esta declaración que “justifica una actuación violenta en función de una supuesta ideología. Esto se llama fascismo”.

Otra imagen difundida por Podem sobre la supuesta actuación desproporcionada de la Policía Local de Alcúdia.

Otra imagen difundida por Podem sobre la supuesta actuación desproporcionada de la Policía Local de Alcúdia. Podem

Por su parte, el ayuntamiento de Alcúdia emitió un comunicado hace unos días justificando la actuación policial. “Desde la Policía local de Alcúdia se considera que la actuación policial tuvo siempre en cuenta los requisitos sobre proporcionalidad y dentro de la legislación vigente, por lo que se procedió legítimamente”, asegura la institución municipal. Añade que “los agentes fueron requeridos por varios asistentes al producirse una bronca entre varias personas” y “por este motivo, los agentes actuaron para evitar un enfrentamiento grave entre personas, una de ellas que se protegió en los baños, y un grupo de otras ocho personas que le perseguían y que siguieron profiriendo insultos y lanzando objetos”.

Según el relato municipal, este grupo “alterado” hacía caso omiso a la peticiones de los agentes “y continuaron con amenazas de muerte y empujones hacia ellos, además de mostrar una excesiva e inusual agresividad”, por lo que se solicitaron refuerzos que no consiguieron calmar los ánimos. “Ante la situación de empujones, insultos y faltas de respeto, los agentes tuvieron que actuar con contundencia y con elementos de defensa legítimos para su utilización ante las agresiones manifiestas que sufrían”, explican. “Finalmente se procedió a la detención de dos personas por desobediencia, resistencia y atentado contra los agentes de la autoridad, siendo conducidos hacia el PAC por ser sometidos a un reconocimiento médico así como establece el protocolo policial en estos casos y finalmente a disposición judicial”.