Las urnas dejaron un panorama político complejo en Alcúdia en el que es posible tanto un pacto de derechas como otro de izquierdas, si bien esta última opción es mucho más complicada. Unió per Alcúdia (UxA), con dos concejales, sería imprescindible para un hipotético pacto progresista, aunque no lo es tanto en un acuerdo conservador siempre que el PP, el ganador de las elecciones con siete representantes, pacte con Vox (tres ediles) y busque en El Pi el único voto que le faltaría.

La candidata de UxA, Carme Garcia, no cierra la puerta a formar parte de un futuro equipo de gobierno «que quiera trabajar por Alcúdia y esté formado por gente valiente, sin colores políticos», aunque precisa que «en ningún caso» considera la posibilidad de incorporar a los «extremos» en un pacto en el que UxA participe, en referencia a Vox y Podemos (un concejal). Por ello, espera que el día de la elección del futuro alcalde o alcaldesa haya «gente valiente que dé un paso al frente» para abstenerse si es necesario para facilitar una investidura sin necesidad de contar con los citados «extremos», y principalmente con Vox, partido que en Alcúdia ha multiplicado por tres su representación en el pleno municipal. 

En este sentido, el candidato de Més per Alcúdia, Tomàs Adrover, que contará en esta nueva legislatura con dos representantes (uno más que en 2019), se muestra partidario a nivel personal de aplicar el cordón sanitario a Vox para que el partido de extrema derecha no pueda formar parte del futuro equipo de gobierno. No obstante, Adrover se remite a la reunión prevista para hoy con todos los cargos electos de Més en la que «seguramente se hablará de esta cuestión», aunque tiene claro que si él tuviera que decidir contribuiría a evitar que la ultraderecha asuma cargos ejecutivos.

Por su parte, la líder del PP, Fina Linares, ha admitido este viernes que ya ha empezado a hablar con los partidos para recoger las primeras «impresiones» y calibrar los posibles apoyos que tendría en una investidura. Para que el PP tenga una mayoría estable necesitaría el apoyo de Vox y otro voto que podría salir de El Pi o bien de UxA, aunque precisa que «también podríamos gobernar en minoría» y buscar apoyos puntuales.