Més per Campos quiere que se instale una placa en ses Covetes en homenaje a las personas y entidades que hicieron posible conservar este paraje. Estas semanas se han cumplido los diez años de la demolición de los apartamentos ilegales que se empezaron a construir en 1994. Fue un hito icónico de un conflicto que arrancó en 1992 y que no finalizó hasta el año pasado cuando los tribunales denegaron indemnizaciones para los promotores de aquella urbanización.

«Han sido 30 años de lucha y cerca de 30 resoluciones judiciales. El día que empezó la demolición fue el inicio del final de una lucha social y jurídica sin precedentes y que se ha convertido en un símbolo de la lucha ecologista. Ses Covetes recuperó al fin el estado natural que le tocaba», esgrime Més per Campos, que elevan en el pleno de este jueves una propuesta para rendir homenaje a las personas y entidades que defendieron el territorio. «Esta moción quiere servir como pequeño homenaje a la lucha ecologista». «Esta lucha titánica no tiene un solo nombre, sino el de centenares de personas. Se trata de una propuesta justa, necesaria y que nos dignifica», defienden desde la formación.