El Consell de Mallorca aboga por potenciar la vertiente agraria de las fincas públicas que gestiona, acogiendo, por ejemplo, actividad ganadera o incorporando estudios de formación reglada en temas agrícolas.
Así lo ha expuesto la consellera insular de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Aurora Ribot, que junto a la directora insular de Medio Ambiente, Inmaculada Férriz, ha presentado la memoria anual de gestión de las 1.394,2 hectáreas de fincas públicas que tiene el Consell de Mallorca: Sa Coma d'en Vidal, Son Fortuny, La Mola de Son Massip, Tossals Verd, So n'Amer, Puig de Santa Magdalena, Sa Torre Picada, Sa Dragonera y Raixa.
La memoria 2022 recoge las principales iniciativas que se han llevado a cabo en las fincas públicas, entre las que destaca la conservación de los elementos del patrimonio cultural y natural de las fincas.
Por un lado se lleva a cabo el mantenimiento de zonas que actúan como cortafuegos, se realizan actuaciones de control de la plaga del banyarriquer en los encinares, se vela por el buen estado de la población de ferrerets, se cuida la colección de olmos resistentes a la grafiosis en aislamiento, etc.
Por otro lado, se realizan trabajos de recuperación y mantenimiento de elementos etnológicos, que van desde los propios caminos (muchos de ellos empedrados) y los 'marges' que los acompañan, barracas de carbonero, molinos de agua o almazaras, entre otros. Este año se ha iniciado el proyecto de rehabilitación del antiguo sistema hidráulico de sa Coma d'en Vidal.
Igualmente el Consell hace mantenimiento agrícola de carácter tradicional: bancales, poda de olivos, plantación de frutales de variedades locales, siembra de especies enriquecedoras del suelo, etc. En este ámbito se ha trabajado en la recuperación de los olivares de sa Coma de Tossals y el Olivar Vell.
Labor educativa
Las responsables del Consell también han destacado la labor educativa y formativa, con todo un programa de actividades de educación ambiental en la finca de Son Amer.
Ribot ha defendido que el Consell debe seguir gestionando estos terrenos porque "sólo así" se garantiza la conservación del patrimonio y los espacios naturales. "Por este motivo, la administración sigue comprando fincas en la naturaleza y seguirá haciéndolo". Mientras, la directora insular de Medio Ambiente ha insistido en que "son espacios ideales para la educación ambiental y la formación profesional", además de "referentes en clave senderista" y cuentan con gran valor patrimonial.
Entre los proyectos de futuro, además de la gestión de la nueva finca pública comprada por el Consell de Mallorca, la Torre Picada en Sóller, se ha informado de una serie de iniciativas que se irán desarrollando en las diferentes fincas. Se trabajará para la recuperación del conjunto de bancales y construcciones ligadas al agua en el sementer de ses Figueres y el olivar de Son Amer, así como de las Cases Velles y de la antigua canaleta de agua entre la Font de Tossals y las Casas des Tossals Verds.
