El Port de Pollença ya ha celebrado la tradición del Pi de Sant Antoni, que ha sido coronado a primera hora de la tarde por el joven Benjamín Lechuga Teruel. El árbol, que había sido talado en la finca de Formentor el pasado 9 de enero, medía 20,5 metros de altura. Debido al fuerte oleaje que afectaba este martes a la bahía de Pollença como consecuencia del intenso viento, no ha podido cumplirse con la tradición de transportar el árbol por vía marítima, por lo que el pino ha llegado a la Plaça Miquel Capllonch por carretera. La lluvia no ha sido impedimento para que los 'molleros' recuperaran esta sentida tradición después de dos años sin poder hacerlo por la situación pandémica.

Esta tarde llegará el turno al Pi de Sant Antoni de Pollença, que ya está de camino hacia la Plaça Vella desde la finca de Ternelles, donde el pasado miércoles la comitiva municipal cortó un pino de 24 metros que quedó reducido a 21 metros tras los pertinentes preparativos.