El gerente de la Agencia Balear del Agua (Abaqua), Guillem Rosselló, y los alcaldes y alcaldesas de Felanitx, Ses Salines, Santanyí y Campos, Jaume Monserrat, Juan Rodríguez, Maria Pons y Francisca Porquer, respectivamente, firmaron ayer el protocolo general de actuación en materia de suministro de agua potable que garantiza que los cuatro municipios recibirán el líquido de la red general del Govern a través de las conducciones de Manacor y Porreres.

El protocolo tiene una vigencia de cuatro años y su objetivo es el de definir la voluntad de las partes firmantes en la ejecución de las obras de prolongación de las conducciones de Manacor y Porreres a los núcleos urbanos de las cuatro localidades del Migjorn.

Abaqua y los cuatro municipio prevén una demanda anual de agua de 600.000 metros cúbicos en el caso de Felanitx; 3,7 millones en Santanyí; 314.544 en Ses Salines y 500.000 metros cúbicos en Campos. «A partir de aquí, las partes establecerán los mecanismos necesarios para empezar a trabajar en el futuro suministro de agua a través de la firma de los correspondientes convenios de colaboración específicos necesarios», explica el Govern.

En principio, está previsto que la conducción de agua de Maria a Petra entre en funcionamiento a principios del próximo año, mientras que las obras de conducción de Petra a Manacor se licitarán a lo largo del primer trimestre de 2023. Durante el mismo año, Abaqua tiene intención de firmar un protocolo para extender la red también desde Manacor hasta las localidades costeras de Cala Millor (Son Servera), Sa Coma (Sant Llorenç) y s’Illot (Manacor).