El regreso del Dijous Bo prepandémico tiene uno de sus mayores exponentes en la revetlla’ de Dimecres Bo, que este año ha vuelto a la zona de bares del casco antiguo de la ciudad, con la calle Born como principal epicentro de la marcha juvenil. 

Cabe recordar que la pandemia obligó el pasado año a trasladar la zona de ocio a los recintos cerrados de la plaza de toros y el cuartel General Luque y a separar los grupos de jóvenes por edad. Ahora todo esto está superado y el Dimecres Bo ha recuperado este miércoles las sensaciones de siempre, con una auténtica marea de jóvenes llegados de numerosos puntos de Mallorca que disfrutan a estas horas de una larga velada en las barras exteriores que habían montado los bares de copas y la música a todo volumen que pinchaban los DJ’s. Ya a última hora de la tarde las calles estaban abarrotadas de gente con el único propósito de divertirse, aunque la hora límite eran las 5 de la mañana.

Un año más, Serveis Ferroviaris de Mallorca ha implementado un servicio especial nocturno de trenes, con numerosas conexiones con Palma y no tantas con Manacor y sa Pobla hasta las 5 de la madrugada, lo que ha contribuido a facilitar la movilidad de los jóvenes de otros municipios con un transporte seguro como el ferroviario.

Antes de la explosión nocturna de la ‘revetlla’ del Dimecres Bo, las calles de Inca registraban una gran animación a última hora de la tarde. Y es que el mercado ya estaba completamente montado y siempre se ha dicho que los ‘inquers’ e ‘inqueres’ aprovechan la tarde del miércoles para recorrer el recinto ferial sin agobios, antes de la invasión de visitantes del jueves.

A lo largo de toda la jornada, como es tradición, grandes grupos de escolares han visitado los puntos más interesantes de la feria, principalmente la muestra de animales de la Plaça del Bestiar. Por la mañana se han llevado a cabo talleres para las escuelas en los huertos urbanos de la ciudad. También se han organizado visitas guiadas a las instalaciones del Teatre Principal, que sigue llamando la atención de los ‘inquers’ un año después de su apertura.