El Grupo de Ornitología Balear (GOB) pide a las administraciones públicas un incremento de la vigilancia y la actividad sancionadora sobre los barcos que fondean en aguas de la Sierra de la Tramuntana para proteger la posidonia.

En un comunicado, el grupo conservacionista denuncia que algunos puntos de esta zona, como Sa Foradada, parecen este verano "el Borne" de Palma debido al tránsito "masivo" de barcos.

La Sierra de la Tramuntana tiene una extensión de 90 kilómetros y ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO en la categoría de Paisaje Cultural.

Sin embargo, señala el GOB, solo hay tres zonas marinas protegidas con la categoría de ZEC (Zona de Especial Conservación) por la presencia de posidonia: Es Rajolí, Port des Canonge y S'Estaca-Punta de Deià.

La protección del mar y la costa permite la estabilización del sedimento, fomenta la transparencia de las aguas e incrementa la biodiversidad y los recursos pesqueros.

A pesar de la protección de la posidonia, cada verano fondean sobre las plantaciones de esta especie "una gran cantidad de embarcaciones", en su mayoría con matrícula de fuera de Baleares o de alquiler, denuncian los ecologistas.

El GOB subraya que el dispositivo de vigilancia de fondeos de la Conselleria de Medio Ambiente no cubre toda la costa y, aunque se aumenten los recursos públicos cada año, no lo hacen en proporción con el incremento del número de embarcaciones. En el caso de la costa de la Tramuntana, solo se vigilan las tres zonas ZEC, añade el GOB.

"Desde el GOB Mallorca pedimos a las administraciones competentes un incremento de los esfuerzos de vigilancia y actividad sancionadora; especialmente pedimos a la administración autonómica encargada de la gestión del Paraje Natural y de las ZEC que cumplan con los objetivos de conservación de este hábitat prioritario que son las praderas de posidonia, tal y como se indica en el PORN (Plan de Ordenación de los Recursos Naturales) y en el Plan de Gestión de la Sierra de la Tramuntana", afirma el grupo ecologista.

En este contexto, el GOB "urge" a que en la costa de la sierra haya presencia de agentes con autoridad para sancionar, así como para la ordenación del fondeo en estos espacios protegidos.

También solicita "responsabilidad a todas aquellas personas que salen al mar a navegar: la destrucción que se puede realizar con una actuación de fondeo equivale a años de crecimiento".

Hay que tener en cuenta que la tasa de crecimiento de la posidonia es de 1 a 2 centímetros al año y, "con la presión a la que está sometida", se imposibilita su recuperación.

En este contexto, Ayuntamiento de Deià ha reclamado recientemente la ampliación de la que probablemente se convierta en la Reserva Marina de Tramuntana, una reserva de interés pesquero, de ámbito estatal, entre Sóller y Escorca.

El consistorio solicita que se incorpore todo el litoral de este municipio y que se regule la saturación de embarcaciones de ocio en verano, especialmente en Cala Deià y Sa Foradada, para salvaguardar la posidonia.