Este miércoles se ha cumplido el tercer día de huelga de recogida de residuos en Alcúdia y sa Pobla y las calles de ambas localidades presentaban ya un aspecto totalmente descuidado en el que las acumulaciones de basuras empezaban a desprender fuertes olores, potenciados por la intensa calor de estos días. Vecinos y comerciantes empiezan a perder la paciencia.

Con el fin de desencallar la situación, el ayuntamiento de sa Pobla ha convocado este tarde una reunión con los trabajadores y la empresa concesionaria para tratar de desconvocar los parones y ha puesto sobre la mesa el compromiso de aprobar el primer día de septiembre un nuevo contrato de recogida puerta a puerta con una duración de ocho años completamente adaptado al convenio autonómico firmado el pasado mes de marzo. También ha ofrecido que una empresa independiente revise la maquinaria. No obstante, tras tres horas de reunión no se ha alcanzado ningún acuerdo y la huelga seguirá hoy.

El Ayuntamiento ‘pobler’ ha expresado su «malestar» con la actual empresa concesionaria, a la que acusa del «incumplimiento reiterado» en el mantenimiento de los camiones y la maquinaria, que «provoca problemas en la vía pública y supone un riesgo para los trabajadores». La institución asegura que antes de la huelga ya solicitó a la empresa un historial del mantenimiento y de las revisiones, además de la «reparación inmediata» de la maquinaria. 

El alcalde Llorenç Gelabert ha declarado antes de la reunión que el principal objetivo es el de «garantizar la salubridad de las calles de sa Pobla» y ha insistido en «trasladar la presión a la empresa, que no puede seguir poniéndose a un lado».

Por su parte, el PP ‘pobler ha exigido al Ayuntamiento el «fin inmediato» de la huelga de basura y ha denunciado el «retraso y la lentitud» de las negociaciones tras tres días de paro. «Hace tiempo que venimos advirtiendo al Consistorio la necesidad de licitar un nuevo contrato de recogida de residuos puerta a puerta», señala la portavoz Violeta Rodríguez.

En Alcúdia, la situación también empieza a ser dramática, con grandes acumulaciones de basuras sin recoger en algunos de los puntos más concurridos del municipio. El alcalde Domingo Bonnín, que había convocado una reunión el martes que finalmente no consiguió el objetivo de desconvocar la huelga por la negativa de los trabajadores a aceptar el ofrecimiento municipal de auditar la maquinaria en los próximos días, ha denunciado este miércoles que «los servicios mínimos no se cumplen» y por ello las calles empiezan a estar llenas de basura. «O no se cumplen o lo hacen en un porcentaje mínimo», precisa.

En este sentido, Bonnín explica que ha encargado a la conselleria de Salud un informe sobre la situación sanitaria para conocer las posibles repercusiones que los residuos amontonados pueden tener en la salud de las personas, ya que el calor extremo acelera la descomposición de los residuos en la vía pública. 

Por otra parte, el alcalde también ha instado a la Policía Local a elaborar un informe que analice los problemas de tráfico que conlleva la acumulación de basuras, ya que hay puntos del municipio en los que los vehículos apenas pueden circular por la presencia de los residuos sin recoger.

Ambos ayuntamientos afectados por la huelga de recogida de residuos reiteran a los vecinos la necesidad de retener en la medida de lo posible las basuras en sus casas para evitar la acumulación en las calles a la espera de la resolución del conflicto.