Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Lletra menuda

Las malas interpretaciones

Los componentes de la plataforma Protegim Sa Ràpita siguen adelante en su oposición frontal a la intención municipal de dejar en un solo carril de circulación la avinguda Miramar, en primera línea. Han presentado alegaciones al Plan de Movilidad Urbana Sostenible que prevé tal modificación y el GOB también ha hecho lo propio con unos postulados prácticamente coincidentes con los de los residentes.

Sin embargo, la alcaldesa de Campos, Francisca Porquer, se asombra ante tanto revuelo y dice que el problema no es de tráfico, sino de mala interpretación, con «demagogia» y «psicosis» añadida. «Hacen política», remata a modo de reproche una alcaldesa que tacha de nociva la actividad de servicio público a la que ella misma está entregada. Todo fuera de lugar. Y una gran desconfianza en el ambiente.

Si damos por buenas las tesis municipales (el primer teniente de alcalde sostiene que el carril único solo se mantendrá en días puntuales) resulta que en Sa Ràpita hay por lo menos 147 mal entendedores, tal es el número de firmantes de las alegaciones. Parece evidente que el Ayuntamiento necesita revisar sus métodos de comunicación y, de paso, que el asunto de la movilidad, con tráfico rodado desmesurado en Sa Ràpita, no se ha afrontado en su integridad.

Por mucho que se esté a la espera de una ronda de circunvalación exterior, mientras, no parece prudente consolidar tan alto grado de desconfianza entre ayuntamiento y vecinos. El supuesto mal menor de transferir los colapsos de primera línea al interior de la población es muy superior a lo indicado. En este punto se entiende la movilidad vecinal. Queda patente también que se ha llegado a este grado de crispación porque el problema se ha postergado en exceso y sin pensar en la previsión.

Compartir el artículo

stats