Sergi López no sabe conjugar el verbo parar. Es un culo de mal asiento… y eso que su faceta como médico de familia en el centro de salud de Porto Cristo requiere de detenimiento. Pero por encima de todo está la felicidad, que aplica tanto a la faceta profesional como a la deportiva, un subterfugio para los logros más personales y solidarios. Por eso el próximo 11 de junio subirá durante más de un día seguido, una y otra vez, las rampas del santuario de Sant Salvador de Felanitx. Un reto tan grande como su objetivo.
28 horas seguidas subiendo y bajando Sant Salvador, ¿quiere decir que no es demasiado?
No, porque es por una buena causa. Pienso que ayudando a los demás también te ayudas a ti mismo; les haces sentir bien e indirectamente te sientes reconfortado. Aportas un granito de arena para hacer un mundo mejor.
Vamos pues al principio. ¿En qué consiste el reto?
Se llama Everesting Challenge, y ya es mítico en el mundo del ciclismo. Se trata de subir los 8.848 metros de desnivel que tiene el Everest, a partir de una sola montaña de cualquier parte del mundo. Es decir, subirla sin detenerse tantas veces como sea necesario para sumar la altura de la cima más alta del planeta.
¿Hay normas?
La principal es que no puedo detenerme para dormir. Sólo pondré pie en el suelo cuando necesite descansar un poco y comer.
¿Pero cuando lleve más de un día pedaleando no puede ser peligroso?
Estoy preparado. Evidentemente he tenido que entrenar y prepararme antes... no sólo física sino mentalmente. Buscando estrategias, pensando en otras cosas, fraccionando el reto y las horas en etapas u objetivos más pequeños. Con esto y los ánimos que iré recibiendo durante toda la jornada estoy seguro de que lo conseguiré. Hace un par de semanas ya subí 23 veces seguidas el santuario de Cura (Algaida) durante ocho horas. Era otro escalón mental previo. Aunque más importante que la fortaleza mental es la pasión y la ilusión, acompañadas de trabajo y esfuerzo.
¿Cuántas veces tendrá que subir y bajar la montaña ‘felanitxera’?
Serán 27 veces, porque aunque Sant Salvador tenga más de 500 metros desde el nivel del mar, son 335 metros de desnivel partiendo desde abajo que digamos. Por eso le decía que calculo que voy a necesitar entre 27 y 28 horas para conseguirlo. Me levantaré a las 4 de la madrugada, para empezar a subir a las 7 de la mañana. Pero la recompensa vale la pena, y además San Salvador es una montaña muy especial para mí, la habré subido más de 500 veces en bici.
Me decía que el objetivo es solidario, cuénteme de qué se trata.
Quiero ayudar a la familia de la joven manacorina Catalina Romero, para poder pagar al menos parte de una silla de ruedas especial que le permita mayor comodidad y calidad de vida. Catalina sufre una parálisis cerebral, tuvo complicaciones al nacer que hicieron que no pudiera mover ninguna de sus cuatro extremidades; Pero todos estos y otros problemas nunca han sido impedimento para que sonría. El reto quiero que sea una fiesta para Catalina y su familia. Para demostrarles que no están solos y que hay gente que los ama y apoya. Y también se trata de dar visibilidad a las personas afectadas por una parálisis cerebral. Su resiliencia, fortaleza y ganas de vivir son un ejemplo para todos.
¿Cuánto espera recaudar aproximadamente?
No lo sé exactamente. Pero confío en que entre todos podamos llegar a una buena cifra. Esta silla especial de la que le hablaba cuesta 7.181 euros, de los que la Seguridad Social podría pagar sólo una parte ínfima. El chasis ya vale 2.400 euros y la almohada para evitar las úlceras 1.000, por ponerle unos ejemplos. Llegados a este punto querría recordar que, todo el que quiera, puede ayudar ya sea a través de donaciones económicas por bizum 639674050 o bien mediante un ingreso en la cuenta ES27 2100 0051 7802 0061 8043. También acudiendo a Sant Salvador a animar, ¡claro!.
¿Cree en las personas?
La gente tiene un corazón enorme. Las personas suelen ser bondadosas; sólo hace falta que alguien les facilite la forma de ayudar y lo harán. En esta vida se trata de ser buena persona.
Hablaba de fortaleza mental, pero ¿no le da miedo bajar de noche estando cansado?
Vencer el miedo, de eso se trata en esta vida, ¿no?. Evidentemente aparte del conocimiento que tengo de cada curva de la montaña, iré equipado con una buena iluminación. Además, la ventaja es que de noche no habrá coches y podré ocupar más parte de carretera. Quiero disfrutar del día, por eso también intentaré ir acompañado por amigos, y quien quiera, el mayor número de subidas posibles.
¿Cuál es su plan para comer e hidratarse?, ¿cada cuántas horas?
Cada cuatro horas comeré un poco, un bocadillo o pasta, y también cada 50 minutos aproximadamente una barrita energética y sales. Y después cada 10 minutos debo beber para mantenerme bien. Por otra parte algo que descubrí en el Ultraman que hice el año pasado y que me fue muy bien cuando tenía dolor de piernas, fue una pomada especial que da mucho calor en las piernas. Aparte de todo esto también estaré pendiente de la crema solar y de los cambios de maillot, que también son importantes.
