La piscina del hotel Mar y Paz de Can Picafort ya es historia. Si el martes era el chiringuito anexo el que sucumbía por la acción de las máquinas excavadoras del ayuntamiento de Santa Margalida, este miércoles ha sido la piscina la instalación que ha quedado sepultada bajo un manto de escombros procedentes del derribo del bar.
El Consistorio margalidà ha aprovechado la caducidad de la concesión para la explotación de este espacio público para solicitar una nueva concesión por un plazo de quince años con el objetivo de construir una nueva plaza.
Este diario se ha puesto en contacto con la demarcación territorial de Costas en Balears para conocer la situación administrativa de este espacio ubicado en la primera línea de Can Picafort, aunque fuentes del departamento han señalado que este tema es competencia directa de la dirección general de la Costa y el Mar del Ministerio para la Transición Ecológica y el Medio Marino, que este miércoles no se había pronunciado al respecto.
Cabe recordar que el GOB ha denunciado que la concesión otorgada al Ayuntamiento todavía no es efectiva, por lo que ha reclamado la paralización de las obras municipales.
