Terraferida ha puesto como «ejemplo a seguir» el parque fotovoltaico que proyecta el Govern construir sobre el depósito regulador del trasvase de sa Costera, en el Port de Sóller, una postura que contrasta con la del alcalde solleric Carlos Simarro que lo considera un atentado visual y paisajístico.
El portavoz del colectivo, Jaume Adrover, explicó que el parque previsto en Sóller «es un buen ejemplo de cómo aprovechar terrenos ya urbanizados o degradados» para crear parques fotovoltaicos, y defendió que estos parque se asienten en zonas ya deterioradas o desarrolladas urbanísticamente en vez de crearlos sobre terrenos rústicos productivos. Por este motivo, explicó que Terraferida se muestra partidario de crear campos solares en zonas como sa Costera, canteras clausuradas o antiguos vertederos como forma para recuperar estos suelos degradados.
El Govern balear ha dado luz verde a la redacción de cuarenta proyectos para crear igual número de parques fotovoltaicos en distintos suelos de titularidad pública de las Balears. En el caso de Sóller prevé cubrir el depósito regulador del trasvase de sa Costera que ocupa una superficie de 7.000 metros cuadrados.
La propuesta del Govern cogió a contrapié al ayuntamiento de Sóller que, a través del alcalde tildó la iniciativa de generar un elevado impacto visual y paisajístico en la zona de sa Cimentera, zona donde se encuentra el depósito. El alcalde criticó además que el Govern no hubiera informado al ayuntamiento de sus pretensiones y recordó que hace unos años el Consistorio solicitó crear una zona deportiva aprovechando la explanada del depósito que fue rechazada por la administración autonómica.
Desde Terraferida, Jaume Adrover defendió que estos parques solares deberían crearse en zonas ya desarrolladas urbanísticamente o que estén deterioradas. Adrover se mostró contrario a que estos parques ocupen zonas de suelo rústico, más aún cuando se asientan en suelo agrario productivo como también ocurre.
