Coincidiendo con la celebración del Dijous Bo, ayer hubo una nueva jornada de paros de la plantilla de Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM), tanto por la mañana como por la tarde. Durante la jornada, el comité de huelga subrayó que, «en ningún caso», han reclamado un aumento de sueldo para parar el conflicto.

La huelga afectó hasta 45 trayectos ferroviarios durante las cuatro horas de parones programados: de siete a ocho de la mañana y de nueve a diez de la mañana. En el caso de la primera franja, el seguimiento fue del 42%, según datos ofrecidos a este diario por la Conselleria. En la segunda franja matinal de paros, fue del 24%.

La medida de presión afectó a un total de 14 trayectos directos entre Palma e Inca y viceversa. Por la tarde, también hubo paros. Concretamente, entre las 16.30 y las 18.30 horas.

Pasajeros llegando a la estación de Inca, ayer. | J.F.S.

El comité de huelga quiso ayer salir al paso de las afirmaciones realizadas por fuentes próximas a la negociación, que señalaban que uno de los motivos principales del plantón de SFM se debe a las demandas salariales de la plantilla, que reclamaría aumentos que se situarían por encima del 2% de incremento salarial que se aplicará a los funcionarios a partir de 2022. «En ningún momento hemos pedido un aumento de sueldo ni tampoco tener más días libres. La cosa no va por aquí», señalaron ayer a este diario fuentes del comité de huelga.

«Lo único que pedimos es que el dinero que invierte el Govern en el sistema ferroviario no se vaya a concesiones privadas. Pedimos que se haga a través de la empresa pública. Es lo único que queremos. No queremos una línea de tren privada financiada con fondos públicos», subrayaron.