En el Dijous Bo recuperado tras el parón del año pasado por la pandemia, los visitantes han manifestado mayoritariamente su satisfacción por la recuperación de la llamada fira de fires de Mallorca. Así, las calles de Inca se vistieron de gala y algunos de sus visitantes no dudaron en compartir sus impresiones en esta gran cita que recupera su esencia. Una sensación percibida es que «la gente se paseaba mucho pero compraba poco dada la crisis actual».
Pedro Sánchez y Mari Cruz Giménez
Estos visitantes de Palma aseguraron que no era la primera vez que acudían a un Dijous Bo. De hecho, confesaron que tenían muchas ganas de volver a la fira de fires. A pesar del miedo que tenían, no tuvieron ninguna dificultad para acceder a la capital del Raiguer con su propio vehículo. Sin duda, lo que más les gustó fue el ambiente de pueblo y poder volver a pasear por una fira de Mallorca ya que se había perdido la costumbre.
Margalida Pujadas
Esta vecina de Inca confesó que nunca ha faltado a una edición del Dijous Bo. Recomendó que «la gente se lo tome con precaución ya que la pandemia continúa entre nosotros». De esta edición, sin ninguna duda, destacó la reapertura del Teatre Principal de Inca, que para ella supera en hermosura al de Palma.
Esther Sánchez
Desde Llucmajor, el de ayer fue su primer Dijous Bo. Destacó que se percibía en el ambiente que la gente echaba de menos pasear por una feria tan emblemática como la inquera.
Isaac Cerdá (Inca)
No lo dudó: «Ya era necesario el Dijous Bo porque da alegría al pueblo». Este vecino de Inca confesó que le hubiera gustado recuperar concursos como, por ejemplo, el de la ensaimada gigante que luego se repartió entre los asistentes al acto. De este año, Cerdá destacó la decoración de las calles, así como la seguridad que había con miembros de la Policia Local y de la Guardia Civil. «Era una fira segura».
Sergui Garreta y Paula Aguiló
Para estos inquers, «todo ha estado muy bien», afirmaron y no dudaron en destacar la organización de la muestra a pesar de estar en tiempos de pandemia. Una alegría poder recuperarla.
Andreu Isern e Isabel Ferrán
Procedentes de Palma, el de esta edición ha sido el primer Dijous Bo de estos dos visitantes, que encontraron que había mucha gente y poca compresión entre la misma, debido a que mucha gente no llevaba la mascarilla colocada a pesar de no poder mantener la distancia, en este sentido echaron de menos un poco de seguridad.