La fachada del ayuntamiento de Son Servera ha amanecido hoy con una pintada, que hace referencia a la recién retirada Cruz de los Caídos. Después de su silenciosa retirada, el ambiente se caldeó con las declaraciones en este periódico, por parte de los curas Santandreu y Mercant, que han tenido su continuidad con estas pintadas en la sede consistorial.

Esta mañana era muy comentada por los vecinos, algunos temen que se esté entrando en un espiral de controversia, mientras otros piensan que se trata de una gamberrada de muy mal gusto que afecta al patrimonio serverí.

La alcaldesa Natalia Troya explicó el pasado 21 de octubre que el derribo del monolito se hacía para cumplir con la Ley de Memoria Histórica y que se había elegido este momento para aprovechar el inicio de la reforma integral de la plaza de la Gent Gran

El rector de Son Servera, Jaume Mercant, expresó su rechazo al derribo de la Cruz de los Caídos y aseguró que "parece que estamos en democracia y no estamos". 

Una semana después de la retirada por sorpresa del monumento franquista, el párroco de Manacor, Toni Amorós, también se vio envuelto en la polémica tras publicar en sus redes sociales una imagen del momento en que la máquina derribaba la cruz con el comentario: “Son Servera, el viernes pasado. ¡Qué tiempos vivimos!. Empezando por la cruz, sin ninguna delicadeza con público cantando...”.