La plantilla de la Policía Local de Santa Margalida está en pie de guerra contra el alcalde Joan Monjo, a quien acusan de intentar «desmantelar» el servicio mediante una reducción de la partida económica destinada a la plantilla en los presupuestos de 2021, un hecho que, según denuncian, ha motivado la renuncia del actual jefe policial, que a finales de mes se incorporará a la Policía Local de Calvià.

Antes de una reunión con los agentes sindicales convocada el viernes por el alcalde, un grupo de agentes policiales esperó a Joan Monjo en el exterior del Consistorio con pancartas en las que denunciaban la falta de agentes suficientes para prestar el servicio en el municipio. «Menos policías no significa más seguridad», «sin policías los ciudadanos están desprotegidos» o «sabes que algunas noches no hay policías en tu municipio» eran algunos de los mensajes que los agentes mostraron al alcalde. También reclamaban «sueldos dignos» y acusaban al gobierno local de fomentar la «decadencia» del cuerpo policial después de «trece años de mala gestión» municipal, entre otros mensajes críticos con el Consistorio.

Entre el viernes y el sábado se han viralizado algunos mensajes en las redes sociales anunciando la renuncia del actual jefe de la Policía Local porque «no quiere ser cómplice del desmantelamiento del cuerpo llevada a cabo por el equipo de gobierno y el alcalde», a pesar de que se trata de una «persona muy preparada» para el cargo por su «capacidad dialogante, eficacia y proximidad con el ciudadano». 

Los partidos de la oposición también se han hecho hoy eco de las protestas policiales. «La situación es límite, tanto que ya no se podrá garantizar un servicio de 24 horas de la policía en nuestro municipio», denuncia Suma pel Canvi, que ha anunciado la presentación de una moción sobre esta cuestión. Can Picafort Unit también ha lamentado este sábado la delicada situación de la plantilla.

Por su parte, el alcalde Monjo admite que ha reducido «entre un 20 y un 25%» la partida destinada a los policías en el presupuesto de 2021 al entender que en las cuentas de 2020 estaba desproporcionada, ya que contemplaba los sueldos de hasta 38 agentes, «una cantidad de policías que nunca tendremos». A su entender, «para cubrir turnos de cuatro personas por las mañanas, tardes y noches son suficientes entre 26 y 27 agentes».

Monjo explica que su intención es la de retirar determinadas funciones a la Policía Local, entre las que cita el trabajo de celador de obras o la medición de ruidos, para que sean desempeñados por una nueva brigada de «ocho funcionarios especiales» que quiere poner en marcha con el objetivo de que la Policía «se dedique solo a la seguridad ciudadana».

El alcalde niega que la marcha del jefe policial esté relacionada con esta polémica y la atribuye a la «oferta» que ha recibido del ayuntamiento de Calvià.