Trece buses eléctricos y de hidrógeno de grandes dimensiones reforzarán la flota de la EMT —y reducirá sus emisiones— gracias a los 13,1 millones de euros que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana acaba de conceder al Ayuntamiento de Palma dentro de un programa de ayudas para impulsar la transición energética del transporte urbano. Buena parte de esta partida procedente de los fondos europeos Next Generation, 5,6 millones de euros, se invertirán en la adquisición de los nuevos autobuses.

Cada uno de ellos tendrá una longitud de 18 metros —la mayoría de los que circulan por Palma ahora miden doce— y su incorporación promete «un salto cualitativo» a la hora de renovar la flota con autobuses de cero emisiones que, a día de hoy, suponen un porcentaje muy reducido del total.

«En 2022 ya licitamos doce vehículos eléctricos de doce metros. Tenemos uno en propiedad y los otros once nos llegarán entre junio y agosto aproximadamente. De este modo hacemos el cambio de la flota, y vamos abandonando el diesel y el gas natural comprimido de forma progresiva por autobuses silenciosos y de cero emisiones», subrayó el teniente de alcalde de Movilidad Sostenible y presidente de la EMT, Xisco Dalmau.

El Ayuntamiento de Palma abrirá próximamente la licitación para adquirir estos nuevos vehículos. Tendrán una autonomía aproximada de entre 16 y 18 horas y permitirán transportar a un mayor número de viajeros por su mayor longitud.

Durante algunas semanas circuló por Palma el prototipo de uno de estos modelos de autobuses eléctricos para comprobar su comportamiento en la ciudad. La experiencia resultó exitosa y el próximo paso será abrir el concurso al que se podrán presentar los fabricantes interesados.

Cuando estos nuevos vehículos se integren en la flota de la EMT, se sumarán a los doce autobuses no contaminantes licitados el año pasado. De este modo, este año la presencia de buses sostenibles en Palma empezará a ganar relevancia.

La mayor parte de la dotación económica del Gobierno procedente de los fondos europeos se destinará a la compra de los nuevos autobuses, pero hay previstas otras partidas para profundizar en la movilidad sostenible.

Puntos de carga en las cocheras

De este modo, se contempla una inversión de 2,9 millones de euros para habilitar nuevos puntos de carga en las cocheras de la EMT, que ya cuentan con placas fotovoltaicas para autoconsumo energético, para alimentar a los nuevos vehículos.

También hay un proyecto para mejorar la accesibilidad en el transporte público que se financiará con 2,8 millones de euros de estos fondos europeos.

Asimismo, en materia de movilidad sostenible también se contempla una nueva ampliación del servicio de bicicleta pública Bicipalma, con más bicis y estaciones en barrios a los que todavía no ha llegado. Para este concepto se destinarán un total de 636.000 euros.

Finalmente, el Ayuntamiento de Palma invertirá algo más de 1,2 millones de euros en la ejecución del proyecto del eje cívico de Cotlliure y su entorno, un plan de rehabilitación de esta degradada zona de Palma que se materializará a lo largo de la próxima legislatura.