El nuevo contrato suscrito por el Ayuntamiento de Palma con la empresa Lokímica, introduce varias novedades en relación al que ha estado en vigor hasta el momento como es la utilización de la tecnología digital para la detección y el control de la población de ratas.

Esta tecnología, que básicamente utiliza una cámara con un sensor capaz de detectar la presencia de roedores y avisar en tiempo real a la empresa se utilizará preferentemente en sitios "sensibles" como pueden ser parques con una elevada presencia de personas, colegios públicos y escoletes.

Este sistema tiene la ventaja en relación al actual, que consiste en la detección de estos roedores mediante "evidencias de su presencia" como restos de comida o que han ingerido una determinada cantidad de raticidas de las trampas colocadas, que no precisan de la colocación de productos químicos, entre otras.

El nuevo contrato también introduce la utilización de drones para la lucha contra las poblaciones de mosquitos. Hasta el momento, cuando se producía una gran inundación en el Pla de Sant Jordi o en ses Fontanelles se utilizaban helicópteros para esparcir el producto larvicida contra estos insectos. Se solían realizar tres tratamientos aéreos al año en función de las necesidades, con un coste de 20.000 euros por jornada de trabajo. Con la utilización de drones, prevista en el nuevo contrato, se prevé poder realizar tratamientos más puntuales sin tener que esperar a que se produzca una gran inundación, en zonas poco accesibles como pueden ser ses Fontanelles o los alrededores de la depuradora de Sant Jordi.

La concejala Elena Navarro con técnicos de Salud y Lokimica han presentado la nueva contrata.

El nuevo contrato, que ya ha sido adjudicado euros por un importe de 1.539.000 euros a la empresa Lokímica, la misma que lleva el control de plagas desde 2013, tiene una duración de tres años prorrogables otros dos.

También introduce mejoras medioambientales ya que todos los vehículos que se utilicen para el servicio serán eléctricos, la realización de una serie de estudios relacionados con la presencia o no de Leismania en las ratas de la ciudad, o de virus transmisores de enfermedades como el dengue en los mosquitos tigre, entre otros.

También se refuerza el servicio de atención al público con dos personas que atenderán personalmente a la ciudadanía y ofrecerán información a los particulares que tengan algún problema ya sea en sus viviendas o solares.

El ámbito de actuación del contrato incluye el subsuelo de la ciudad, con sus redes de alcantarillado y alumbrado público, imbornales de aguas pluviales, la red semafórica y los contenedores soterrados, así como los espacios exteriores, como parques, jardines solares, torrentes y espacios de ocio canino, entre otros.  

La empresa adjudicataria también se hace cargo del control de plagas en los edificios municipales, incluyendo los centros de educación infantil y primaria, las escoletes municipales, los mercados y las bibliotecas.

La empresa contará con 16 técnicos organizados en siete equipos. Diez realizarán trabajos preventivos, dos se dedicarán al control de mosquitos y otros dos a la atención de las incidencias.