La nueva ordenación urbanística del antiguo acuartelamiento de Son Busquets no podrá ser aprobada ni inicialmente ni definitivamente en este mandato. Se deberá esperar a la próxima legislatura para disponer de un nuevo Plan Especial de Rerforma Interior (PERI) que plasme los acuerdos alcanzados entre el Ayuntamiento de Palma y el ministerio de Defensa primero y el de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana después, que modifican sustancialmente la anterior ordenación prevista, aunque manteniendo la obligatoriedad de construir un mínimo de 831 viviendas todas ellas de protección oficial y en régimen de alquiler.
Si bien el Consejo de Ministros ha ratificado este martes la compra por parte de la Entidad Pública Empresarial del Suelo (SEPES) dependiente del ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana de los 110.858 metros cuadrados que conforman el antiguo acuartelamiento que da a las carreteras de Valldemossa y Sóller a su anterior titular, el ministerio de Defensa, por un importe de 43.2 millones de euros, tanto los nuevos propietarios como el Ayuntamiento de Palma, a través de la concejalía de Modelo de Ciudad, hace meses que están trabajando paralelamente en el nuevo PERI.
De hecho, según la teniente de alcalde de Modelo de Ciudad, Neus Truyols, su departamento está trabajando en la elaboración de un estudio social con el fin de justificar la necesidad de que las más de 831 viviendas previstas en Son Busquets sean todas ellas de protección oficial, aunque en sus distintas modalidades, y en régimen de alquiler. También se justificará la necesidad de las barriadas del entorno de disponer de los equipamientos previstos, así como de los espacios verdes y de la superficie que se prevé de uso comercial, entre otros parámetros
Por su parte, el SEPE, que es el nuevo propietario de estos terrenos ya ha encargado los trabajos necesarios para elaborar los informes geológicos sobre las características del suelo y topográficos, con especial incidencia sobre el estado actual de los edificios y de su posible conservación en algunos casos.
También se realizará un reconocimiento de la vegetación puesto que tras las visita realizada a principios del pasado mes de diciembre a la que asistieron el director general de Vivienda y Suelo del ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Javier Martín Ramiro, y el director general del SEPES, Fidel Vázquez, se comprobó la existencia tanto de una rica vegetación en el antiguo recinto militar como de elmentos patrimoniales que en el proyecto definitivo se podrían conservar.
Si bien Truyol insiste en que antes de las elecciones posiblemente el nuevo PERI no estará redactado si que confía en que esté "muy avanzado" y que incluiso antes de llevarlo a aprobación por parte del pleno del Ayuntamiento de Palma (ya en el próximo manto) se haya abierto un proceso participativo para dar a conocer la propuesta a vecinos y entidades, con el fin de que también pueden realizar sus aportaciones.
Programa pactado
El programa urbanístico previsto para Son Busquets, pactado ya entre Cort y la nueva propiedad, incluye que un 50% del mínimo de 831 viviendas que se podrán construir deberán ser de promoción pública en régimen general y el otro 50% a precio concertado, todas ellas de alquiler. Además un mínimo del 15% de las viviendas deben gestionarse a través de cooperativas en régimen de gestión de uso, cohousing o destinados a jóvenes, personas mayores y colectivos vulnerables. Las 831 viviendas ocuparán una superficie edificable de 83.000 metros cuadrados y la densidad será de 75 habitantes por hectárea y se podrán incrementar hasta las 900 casas, manteniendo la misma edificabilidad, con el fin de adaptar mejor las superficies de las viviendas a las necesidades de la demanda. También se reservarán 10.000 metros cuadrados destinados a la creación de equipamientos de vivienda dotacional dirigidas a colectivos con necesidades específicas (vulnerables, discapacitados, personas mayores y jòvenes.
Por lo que se refiere a los equipamientos y espacios libres, el nuevo planeamiento de este espacio deberá contemplar una parcela de un mínimo de 800 metros cuadrados para la construcción de un nuevo colegio de educación Infantil y Primaria, además de otros 2.000 metros cuadrados para una escoleta de 0 a 3 años.
También se deberá reservar una superficie con un mínimo de 2.500 metros cuadrados para un equipamiento deportivo, además de otra con más de 4.000 metros cuadrados de uso sociocultural, de los cuales un mínimo del 30%, si es posible aprovechando alguna antigua nave existente, se deberá destinar a espacios para la creación cultural y digital.
Los equipamientos previstos se completan con un espacio libre público con una superficie mínima de 25.000 metros cuadrados y otra parcela de más de 4.000 metros cuadrados para un equipamiento sanitario.
También se han acordado una serie de condiciones específicas de diseño de lo que será este nuevo barrio con diversidad social y de usos, integrando vivienda asequible y actividades económicas. Deberá ser también un "referente" por lo que respecta a la sostenibilidad y a la calidad urbanística y arquitectónica. También se pretende que el nuevo barrio sea una "superisla", que se mantenga el patrimonio existente y el arbolado, garantizar la óptima eficiencia energética a partir tanto del planeamiento urbanístico y la edificación, además de favorecer el uso de materiales locales.
