Las obras de sustitución del pavimento y las redes de agua potable, residual y pluviales, no van a afectar, al menos por ahora y de forma significativa, a las terrazas de los bares y restaurantes. Los operarios de la empresa adjudicataria del proyecto, Melchor Mascaró, señalizaron ayer sobre el pavimento actual la zona por la que transcurren las actuales canalizaciones de agua potable y pluvial, que se tienen que sustituir, y comenzaron a descargar las vallas con las que se procederá al cerramiento de la zona en las que se trabajará.

En una primera fase se trabajará en una zona en forma de L comprendida entre la esquina del bar Cristal, pasando por la confluencia de Marie Curie hasta la Porta pintada. Las terrazas de los bares y restaurantes afectados van a continuar en funcionamiento y podrán seguir ocupando el espacio comprendido entre la fachada del establecimiento y la primer línea de árboles.

Desde este punto hasta la primer valla que delimitará la zona de obras se dejará un paso de un mínimo de tres metros para los peatones. La zona de obras tendrá una anchura de unos cuatro metros, por lo que el resto de la plaza, por el momento y al menos en estos primera fase de sustitución de las redes de suministro y saneamiento de esta zona, que se ejecutarán entre marzo y mayo, no se verá afectada.

Se prevé que tanto la señalización como la colocación de las vallas para delimitar esta primera fase se prolongue hasta bien entrada la semana que viene, por lo que durante estos días tampoco se utilizará previsiblemente maquinaria pesada ni habrá un exceso de ruidos. Posteriormente, entre abril y junio se actuará en las canalizaciones existentes entre la Porta Pintada hasta Alexandre Rosselló.