Operarios de la Empresa Municipal d'Aigües i Clavegueram (Emaya) están trabajando este miércoles desde primeras horas de la mañana en el relleno del gran socavón provocado en las Avenidas por la borrasca Juliette.

Fuentes de la empresa han indicado que, una vez que ayer por la mañana se consiguió reparar la arteria de agua potable afectada, se continuó sacando tierra y ensanchando la zona de trabajo con el fin de proceder a reparar la conducción ovoide del colector de agua residual y pluvial que se vio afectada en su parte más alta, aunque en todo momento siguió operativo.

Operarios de Emaya trabajaron el martes en el saneamiento de la zona afectada hasta las diez de la noche. Emaya

Ayer por la tarde-noche los trabajos se centraron en el saneamiento de la zona y en la colocación de una gruesa capa de hormigón con el objeto de tapar el colector de residuales, que discurre paralelo y en la base del tramo de lienzo de la antigua muralla renacentista existente en el subsuelo

Esta mañana han descargado varios camiones de grava gruesa con la que se comenzará a rellenar el agujero de más de ocho metros de diámetro por otros tantos de profundidad. Se estima que estos trabajos durarán al menos otros dos días más sin contar el tiempo necesario para proceder a la compactación del firme y al posterior asfaltado.

Desde primeras horas de la mañana numerosos curiosos se han acercado hasta la zona en obras, lo que ha provocado que se hayan producido en algunos momentos de peligro, cuando aún la zona no estaba señalizada ni había agentes de la Policía Local para regular el tráfico, situación que se ha normalizado posteriormente con la instalación de barreras que impedían que los curiosos se acercaran al agujero y la regulación del tráfico por parte de agentes de la Policía Local.

Varios camiones han descargado grava gruesa para tapar el agujero. J. C.

Mientras tanto en esta zona de las Avingudas, situada en su confluencia con la calle Sant Miquel y 31 de Diciembre, continúan las restricciones de tráfico impuestas desde ayer, con tan solo un carril de circulación en dirección al mar, utilizado preferentemente por los autobuses y los vehículos procedentes de Sant Miquel y 31 de Diciembre que se dirigen hacia la plaza de España, y tres carriles en dirección contraria, hacia los institutos.

En dirección al mar la mayor parte del tráfico se desvía por el túnel existente hacia General Riera y Antoni Marqués.

Avería del el paseo Marítimo

Por lo que respecta a la canalización de agua residual del paseo Marítimo que también se vio afectada por la borrasca, el martes por la tarde se consiguió repararla, y a última hora se restauró el tráfico en uno de los carriles de circulación permitiendo el paso en dirección a Portopí. Los vehículos que circulan hacia el centro de la ciudad siguen siendo desviados por la avenida Joan Miró y Monsenyor Palmer.

Numerosos curiosos se han desplazado a la zona del socavón. J.C.

También apareció un "blandón" en la Avenida Alexandre Rosselló situado en el carril en dirección al mar que, en principio, según la inspección realizada por los técnicos de Infraestructuras, no afecta al subsuelo, aunque también se procederá a su reparación.

Renovación de redes

El presidente de Emaya, Ramon Perpinyà, tras confirma que los trabajos de Avenidas durarán aún unos cuantos días más, a la espera de la total compactación del terreno y el posterior asfaltado, ha recordado que la empresa municipal ha invertido en cuatro años 84 millones de euros en la renovación de la red de saneamiento de la ciudad en diferentes actuaciones.

De esta forma, están en marcha o han concluido 45 proyectos en 32 barriadas de Palma por un importe de 25,5 millones para renovar la red de suministro de agua potable y de alcantarillado. En concreto, se renuevan 70 kilómetros de conducciones, 55 de ellos correspondientes a tuberías de agua potable y 15 de la red de alcantarillado.

También se han ejecutado grandes proyectos, que han supuesto una inversión de 58,5 millones, que han afectado, entre otras zonas, a la Platja de Palma, la ejecución del colector de aguas mixtas y el tanque de tormentas, así como la renovación de pluviales del polígono de Son Castelló.

Según Perpinyà, se trata del período de la historia de Emaya con mayor inversión en infraestructuras de suministro y saneamiento de aguas.