Las obras del nuevo Paseo Marítimo de Palma han entrado en una nueva fase en la que los trabajos se concentrarán en el lado de tierra y por tanto implicará la retirada de las terrazas afectadas. Como consecuencia, los cuatro carriles de circulación que se mantienen operativos (dos de ida y dos de vuelta) se trasladarán a la parte más cercana al mar. Está previsto que esta modificación —que no implicará la reducción del tránsito que circula actualmente por la vía— entre en vigor a partir de mañana.

Los restauradores que explotan alguna de las terrazas afectadas por los trabajos ya han sido informados de que deben retirar el mobiliario que está encima de la acera y los toldos.

La reforma del Paseo Marítimo concluirá en 2024. La nueva vía brindará más espacio a los peatones, con aceras más anchas y zonas ajardinadas.