La presidenta del Gobierno de las Islas Baleares, Francina Armengol, y el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, han concluido hoy la II Cumbre Islas Baleares-Comunidad Valenciana. El encuentro, que se ha celebrado miércoles y jueves en Valencia, ha servido para llegar a un frente común entre ambas comunidades para la descentralización del Estado, conseguir más federalismo para reclamar más poder político ante Madrid y hacer un pacto de financiación.

La presidenta, como también recoge la Declaración de Valencia firmada hoy, ha defendido el valor de la cooperación leal y el diálogo para construir soluciones para la ciudadanía y fortalecer un Estado más diverso y plural: “En estos tiempos en que parece que algunos viven solo de la crispación y las polémicas estériles, aquí, en Valencia, en el Mediterráneo, el diálogo se impone al revuelo”, ha dicho.

En este sentido, la presidenta Armengol ha recordado los acuerdos para dar una respuesta social a la pandemia, que ahora se renuevan con nuevas medidas para hacer frente en “el invierno de los precios”. También ha destacado que la colaboración con la Comunidad Valenciana contribuye al hecho que ambas sociedades se hagan escuchar para impulsar en cuestiones como la descentralización del Estado, la dotación de más recursos para financiar competencias clave y la generación de inversiones transformadoras.

Ambos representantes han subrayado la importancia del diálogo constante con agentes sociales para llegar a acuerdos pragmáticos que den solución a los problemas reales de la sociedad. Así, han acordado incrementar sus políticas de acompañamiento a la ciudadanía que se han puesto en marcha en los meses previos, tanto en Baleares como Valencia, con la voluntad de seguir liderando el crecimiento económico en el Estado y no dejar atrás nadie. 

En este sentido, los presidentes se han referido a uno de los acuerdos logrados, que nace de una propuesta que los agentes sociales de las dos regiones habían hecho ayer para pedir al Estado un fondo de formación para dar ayudas a las empresas y trabajadores turísticos fijas discontinuos, que tiene que permitir que se mantengan de alta en los meses de inactividad laboral realizando programas de formación. “Se trata de darlos más oportunidades y más protección, a la vez de poner la política al servicio de las cuestiones que de verdad mejoran las vidas de las personas,” ha explicado Armengol. 

Finalmente, los dos presidentes han subrayado la importancia, la protección del medio ambiente y la sostenibilidad y su potencial para generar actividad económica y progres social.