A primera hora de la mañana de este miércoles entró en el puerto de Palma el patrullero de la Armada Infanta Elena, en lo que será su última visita, ya que está realizando un último viaje de despedida por varios puertos, dado que será dado de baja próximamente.
Inicialmente fue construido como una corbeta, tercera de la serie Descubierta, en los astilleros de la Empresa Nacional Bazán en Cartagena, siendo entregado en abril de 1980, lleva por tanto más de 42 años en servicio. Con el tiempo la Infanta Elena, junto a su gemelo la Infanta Cristina, fue reconvertido a patrullero, labor que se realizó entre septiembre del 2004 y junio del 2005, pasando a partir de entonces a realizar misiones de vigilancia y seguridad marítima, colaborando además con otros organismos públicos.
El buque tiene un largo historial, como corbeta ha participado en numerosas maniobras tanto con otras unidades de la Armada como con la OTAN. En 1991 formó parte de la fuerza multinacional que realizó el bloqueo naval impuesto por la ONU contra Irak y en 2002 participó en la operación que se realizó durante la crisis del islote Perejil. Como patrullero ha participado también en el océano Índico y en la operación Atalanta de lucha contra la piratería.
Las dimensiones del buque son 88 metros de eslora y 10,4 de manga, con un desplazamiento de 1.510 toneladas. Puede alcanzar una velocidad de hasta 25 nudos y su dotación la componen 89 miembros.
Actualmente está realizando un viaje de despedida en el que ya ha visitado Cádiz. De Palma partirá para Alicante, para terminar finalmente en Cartagena el próximo día 2 de octubre.
