El portavoz de Cort, Alberto Jarabo, anunció ayer que el ayuntamiento de Palma ha adjudicado el contrato para llevar a cabo otro estudio de contaminación del suelo en el depósito municipal de Son Toells.

Para realizar el análisis, que durará unos tres meses, la empresa seguirá las directrices de la conselleria de Medio Ambiente del Govern. El objetivo es poner fin a la contaminación que se detectó hace casi tres años en el depósito, que provocó el vaciado de vehículos y cierre de las instalaciones, así como una multa de 40.000 euros impuesta por el Ejecutivo balear.

Cabe recordar que un informe del Seprona elaborado antes del cierre determinó que en Son Toells se producen vertidos de aceites y de otros productos contaminantes directamente al suelo. El propósito del Ayuntamiento es adoptar medidas para la protección del terreno y habilitar mecanismos para evitar la filtración del aceite y para la recogida de los líquidos tóxicos, como exige la normativa actual.