La playa de Cala Major cumplió ayer su séptimo día cerrada al baño. Cort colocó la bandera roja el pasado 25 de mayo, después de un vertido de aguas mixtas por la lluvia, y desde entonces no se ha vuelto a abrir. Cabe decir que esta playa, junto a Ciudad Jardín y Can Pere Antoni, se cierra de forma frecuente después de los días de precipitaciones, si bien no es habitual que la reapertura tarde tanto.

Según explicaron ayer fuentes del Ayuntamiento, los técnicos municipales detectaron en la zona una avería del alcantarillado que estaba filtrando contaminación en el agua, por lo que se decidió mantener la prohibición de manera preventiva.

Pese a que los desperfectos se arreglaron el pasado fin de semana, el análisis de del agua continuaba detectando sustancias contaminantes ayer por la mañana. El Consistorio repite hoy el examen, a la espera poder permitir de nuevo el baño este mismo miércoles si el agua está limpia.

De no ser así, el Ayuntamiento realizará un estudio para saber qué sucede. De todas formas, desde Cort explican que en la renovación y saneamiento del agua influyen factores externos, como las corrientes marinas o la dirección del viento.