El Ayuntamiento de Palma no prevé la adopción de medidas adicionales más allá de las que ya se están ejecutando en la barriada de Santa Catalina con el fin de atajar los actos incívicos, como el detectado el pasado fin de semana y denunciado por la entidad Barri Cívic, en la que se ve a una pareja realizando el acto sexual en plena calle.

La teniente de alcalde de Seguridad Ciudadana, Joana Maria Adrover, ha recordado que esta barriada cuenta desde hace meses con una vigilancia policial reforzada y que se incluye cada fin de semana en el itinerario que se establece contra el botellón. Asimismo, desde el pasado mes de marzo se ha realizado una intensa campaña contra el ruido en esta zona que se ha saldado con el precinto de 11 aparatos musicales a otros tantos establecimientos por superar los 85 decibelios permitidos en la reciente modificación de la ordenanza antirruido. Según Adrover, la mayoría de los aparatos precintados son de locales de Santa Catalina, el último el pasado domingo. Además de los aparatos precintados se han incoado 20 expedientes más de estas características, también la mayoría de ellos en esta barriada.

La teniente de alcalde ha recordado también que desde este lunes ya está en funcionamiento el operativo especial veraniego, que también incluye esta barriada como especial intervención. Ha manifestado asimismo que las actuaciones que diseña la Policía Local son cambiantes en función de las necesidades y que se tienen en cuenta las demandas tanto de los policías de proximidad como de las entidades ciudadanas presentes en la mesa de diálogo.