La histórica puerta del parque de ses Veles recuperará su aspecto original. El Ayuntamiento anunció este viernes que eliminará el mural en honor a mujeres defensoras de los derechos humanos que fue pintado recientemente, por encargo de la UIB y con la autorización del Ayuntamiento, para disgusto de los vecinos y de la asociación conservacionista ARCA, que reclamaron que se restituyera el aspecto de este elemento arquitectónico.

Este viernes, vecinos del barrio de ses Veles, la Universitat y Cort se reunieron y acordaron buscar una nueva ubicación para este mural, obra de la artista Carolina Adán Caro, y restituir la imagen de la histórica puerta, vestigio del pasado industrial que perteneció a la antigua fábrica de maderas CIMSA, además de ser un símbolo de la lucha vecinal por disponer de un parque en este barrio.

Será el Ayuntamiento el encargado de la eliminación de la pintura, de color verde y con los rostros de conocidas activistas, como Berta Cáceres, quien, además, cuenta desde hace años con otro mural pintado por los artistas Somart y Enzo a menos de 50 metros.

Por su parte, la UIB se comprometió este viernes a buscar una ubicación alternativa a este mural y presentar una nueva propuesta de intervención al Ayuntamiento «para que Palma disponga de un espacio en el que se homenajee a las mujeres del mundo defensoras de los derechos humanos», informó Cort en un comunicado. 

Este viernes, ARCA celebró la rectificación del Ayuntamiento y manifestó su esperanza de que el nuevo emplazamiento para el mural sea adecuado. Además, propuso la colocación de una pequeña explicación junto a la puerta de ses Veles para dar a conocer su historia.

Tal como publicó este diario días atrás, Carolina Adán Caro pintó este mural por encargo de la UIB para el programa de apoyo a las mujeres defensoras de la Oficina de Cooperació de la propia Universitat, aprovechando la celebración de las «Jornadas de Cooperación Feminista. Del Discurso al Acuerpamiento»

La puerta se pintó por encargo de la Oficina de Cooperació de la UIB y con autorización del Consistorio palmesano

Para realizar este mural, hace un año, la UIB solicitó un espacio al Ayuntamiento. En esta propuesta se implicó el área de Igualdad, dirigida por la regidora Sonia Vivas, que solicitó al de Infraestructuras realizar la intervención artística en la puerta del Parc de ses Veles. Cuando el departamento dirigido por Angélica Pastor constató que la puerta no estaba catalogada, pese a tener más de un siglo de antigüedad, autorizó la petición.

El enfado de los vecinos al descubrir esta intervención fue doble, ya que, por un lado se trataba de un elemento histórico y, por otro, el mural se había autorizado sin consultar a la asociación.

La polémica obligó a Cort a suspender la inauguración de este mural, prevista para el pasado sábado, ya que el grupo de Cooperació de la UIB se negó a participar en este acto.