En pocas ocasiones un anuncio de mejora efectuado por el Ayuntamiento de Palma se inicia con tanta rapidez como el correspondiente a la ejecución del denominado itinerario peatonal que afectará a las calles Antoni Planas i Franc, plaza del Temple y Ramon Llull.
Si bien esta actuación está incluida en el punto número cuatro del Plan Palma Camina, ayer, en el momento de concretar los trabajos a realizar, que comenzarán el próximo lunes por parte de la concejalía de Infraestructuras del Ayuntamiento de Palma, ya se procedió al cambio del sentido de circulación de la calle Socors que, a partir de ahora, será de salida desde la plaza del Temple hasta Fra Cuñado, situada junto al colegio de Sant Agustí.
Este cambio circulatorio es necesario debido a que, como consecuencia de la ampliación de las aceras que se ejecutará en la calle Antoni Planas, que ahora es de doble sentido de circulación, ésta será de un único sentido en dirección hacia la plaza del Temple. Por ello, para dar aslida al tráfico procedente de Botons, Pelleteria y Sol se procede al cambio de sentido en este tramo de Socors.
Tal como han explicado esta mañana los tenientes de alcalde de Movilidad, Francesc Dalmau, y el teniente de alcalde de Participación Ciudadana y presidente del Distrito Centro, Alberto Jarabo, la ampliación de las aceras de estas calles permitirá ganar más de 1.000 metros cuadrados para los peatones sin eliminar ninguno de los estacionamientos existentes en estos momentos. La actuación tiene un coste de 350.000 euros, será ejecutada por la concejalía de Infraestructuras y los trabajos tendrán una duración de cuatro meses, por lo que se prevé que estén concluidos en enero.
Dalmau ha explicado que el principal objetivo de este nuevo eje para peatones hacia el centro es el de mejorar la accesibilidad para los peatones desde las barriadas del Llevant de Palma hasta el centro ampliando las aceras y ejecutando distintas actuaciones de cambio de sentido de calles, con el fin de evitar conflictos entre residentes, escolares y el tráfico rodado.
La actuación prevista en la calle Ramon Llull, de acuerdo con los responsables del centro educativo existente, van a consistir en la aplicación de la acera actual hasta la altura de los bolardos que se colocaron de forma provisional, hasta alcanzar una anchura de 2,60 metros. El resto de la calle, que se pavimentará con losetas de caliza será de plataforma única con el fin de que permita el acceso de camiones si es preciso desde la plaza del Temple hasta la de Sant Francesc.
