El área de Bienestar Social del ayuntamiento de Palma destinará 610.000 euros más en ayudas para vivienda, una cantidad que ha sido transferida por el área de Modelo de Ciudad para hacer frente a la emergencia habitacional que sufren muchas personas en el municipio. «Ante este contexto, no podemos hacer nada más que sumar esfuerzos con Bienestar e inyectar un dinero que teníamos destinado inicialmente al programa de mediación de alquiler y alojamiento», refirió la regidora de Modelo de Ciudad, Vivienda Digna y Sostenibilidad, Neus Truyol, quien consideró que «la emergencia social es tan grave y básica que la prioridad es dar una respuesta inmediata». Truyol reclamó la regulación de los precios de los alquileres en zonas tensionadas, como Palma, para hacer frente a una situación considerada crítica. «El objetivo principal es garantizar el acceso a la vivienda de las personas más vulnerables», dijo Truyol. Para alcanzar esta meta la regidora expresó la necesidad de contar con mecanismos reguladores que deberían incluir la intervención del Estado: «El Ayuntamiento está actuando para detener el golpe pero necesita recursos estructurales, medidas reguladoras. En este sentido, insistimos en la urgencia de que el gobierno del Estado permita regular el precio de los alquileres ante una situación de emergencia habitacional como la que vivimos». Por su parte la coordinadora General de Bienestar Social, Catalina Encontrado, destacó que «tanto el área de Modelo de Ciudad, a través de la Oficina antidesahucios, como la red de atención social de Bienestar, trabajan a destajo para no dejar a nadie atrás».

En lo que va de año el área de Bienestar Social ha destinado un total 8,5 millones de euros en ayudas económicas, de las que 3,5 se han dedicado a vivienda y 4,2 millones a cubrir necesidades básicas.