El alcalde de Palma, José Hila, ha afirmado esta mañana, en el transcurso de una visita de obras realizada a la barriada de Son Cladera, que las restricciones de aparcamiento en el centro de la ciudad y en el Eixample previstas con la progresiva implantación del denominado plan Palma Camina, van a beneficiar a los transportistas, puesto que podrán disponer de más espacios de carga y descarga en los lugares ocupados ahora por los vehículos particulares.

Hila ha recordado que se ha ofrecido a las empresas de distribución de mercancías desde hace meses que colaboren con el Ayuntamiento en la implantación de esas medidas y que les indiquen qué zonas más se podrían señalizar como carga y descarga.

En relación al conflicto mantenido con la Asociación de Empresas de Distribución de Alimentos y Bebidas en las plazas del Mercat y Joan Carles I y la calle Unió, el alcalde ha manifestado que, con la ampliación realizada cuando se peatonalizó la plaza del Mercat tanto en la calle Unió como en la Plaza Joan Carles I y ahora con la cesión hasta las 11 de la mañana del estacionamiento de taxis situado junto al Gran Hotel tienen espacio suficiente, respaldando de esta forma la postura del teniente de alcalde de Movilidad, Francesc Dalmau, que ha negado que en el acuerdo alcanzado con la asociación de distribuidores de mercancías, se incluyera la posibilidad de acceder a la plaza del Mercat, tal como su presidente, Bartomeu Servera, afirma.

En relación a las restricciones de aparcamiento en el centro previstas también el en Palma Camina, con la ampliación ahora del Acire de Sant Jaume en Bonaire y la implantación futura en el resto del centro histórico que no sea Acire como Zona de Aparcamiento Restringido (ZAR), en la que se permitirá circulación aunque no el estacionamiento a los no residentes, ha manifestado que si no se aplican voluntariamente por parte del Ayuntamiento se deberá hacer de forma forzosa, puesto que la Unión Europea exige a todas las ciudades con población mayor de 50.000 habitantes la delimitación de las denominadas zonas de bajas emisiones. Ha recordado asimismo que cuando se aplica un cambio circulatorio o una peatonalización siembre hay personas y entidades que protestan, aunque "siempre se acaba reconociendo que eran actuaciones necesarias y beneficiosas".