La asociación Memòria de Mallorca ha expresado este sábado su "indignación" por la sentencia del Tribunal Superior de Justicia que ordena la protección como bien patrimonial del obelisco del parque de sa Feixina de Palma, que la organización aboga por demoler por ser un "monumento franquista".

Memòria de Mallorca critica en un comunicado la "judicialización" que han promovido ARCA y asociaciones de Vecinos de Santa Catalina para impedir "la retirada de simbología fascista", que consideran un vestigio de cuarenta años de dictadura.

Para la asociación, es una "simpleza" el argumento de ARCA de que el patrimonio no tiene ideología, porque "lo primero que hacen los pueblos cuando derrocan una tiranía es derribar y eliminar su simbología".

A su juicio, el intento de "contextualizar el fascismo que impregna todo el monumento" por parte del Ayuntamiento de Palma en 2010 fue una equivocación y "el origen de la surrealista y vergonzosa situación" actual.

Memòria de Mallorca asegura que es "imposible" que pudiera darse una sentencia similar pudiera darse en Alemania respecto a monumentos de la época nazi, porque aquella es "una sociedad auténticamente democrática", mientras que España "aún no ha superado el franquismo".

Para la organización, "el dolor de las víctimas" por la ofensa que les supone el monumento al crucero "Baleares" debe primar sobre "un inexistente valor patrimonial". 

En cambio, el grupo municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Palma ha celebrado la sentencia del TSJB. “Llevamos muchos años de desvaríos de las formaciones de izquierda que gobiernan para una pequeña parte de los palmesanos y siempre anteponiendo la ideología a las necesidades de los ciudadanos”, ha manifestado la portavoz de Cs, Eva Pomar. 

La portavoz de C´s ha exigido "celeridad" en la protección de este monumento y también ha pedido al Pacte de Cort que “deje de malgastar el dinero de los palmesanos en recursos judiciales fruto de su cerrazón ideológico”.