El número de perros que ingresaron entre los meses de enero y noviembre del año pasado en las instalaciones del Centro Municipal de Protección Animal de Son Reus, dependiente del Ayuntamiento de Palma, por renuncias de sus propietarios, abandono o por ser vagabundos disminuyó en un 34%.

En este período de tiempo ingresaron el año pasado en estas instalaciones municipales 704 perros vivos y en buenas condiciones, mientras que entre enero y noviembre de 2019 fueron 1.065.

La reducción de entradas de mascotas más importante se produjo en los meses de marzo y abril, coincidiendo con el confinamiento debido a la pandemia, aunque esta tendencia a la baja ha continuado y el pasado mes de noviembre fue uno en el que se produjeron menos entradas, con 47 perros frente a los 89 del mes de octubre de 2019 o los 109 del mismo mes de 2018.

Según informaron desde el centro de protección animal han bajado notablemente tanto los abandonos como las renuncias por parte de los propietarios ya que en noviembre solo ser produjeron 16 abandonos, frente a los 40 de 2019. Por su parte, las renuncias en este mes pasaron de las 22 registradas en 2019 a las nueve de este año.

En relación a las salidas, en octubre y noviembre abandonaron estas instalaciones más perros que los que entraron.

Más de la mitad de los animales que continúan en las instalaciones son potencialmente peligrosos

En el mes de octubre se produjeron 49 adopciones y sus propietarios recuperaron 24 mascotas, mientras que las entradas fueron de 57. En el mes de noviembre las entradas fueron de 47 mascotas, frente a las 28 adopciones y 22 recuperaciones.

La combinación de menos entradas de mascotas con el incremento de las adopciones y recuperaciones por parte de sus propietarios ha propiciado que el pasado día 30 de noviembre hubiera en estas instalaciones un total de 48 perros, cuando el centro dispone de una capacidad para alojar a 108 mascotas, por lo que se encontraba al 40% de su capacidad

De ellos, 25 (el 58%) ejemplares son considerados como potencialmente peligrosos, de difícil adopción por sus características y por requerir una licencia específica para su tenencia. El resto de animales son fácilmente adoptables hasta el punto de que para ellos en algunos casos hay lista de espera.

Mejoras en las instalaciones

A lo largo de 2020 se han realizado una serie de mejoras en las instalaciones del centro municipal de protección animal entre las que destacan la construcción de vestidores en el edificio del quirófano, la edificación de una caseta de vigilancia y la dotación de una nueva puerta de entrada al centro automatizada. También se han mejorado las jaulas de los animales con la renovación de 40 puertas y rejas, la realización de reparaciones en los cerramientos y la renovación de los censores de vigilancia. También se han instalado 120 metros de seto y se ha realizado una prueba para la renovación del pavimento de todas las jaulas de los animales con el fin de proceder a su ejecución a lo largo del presente año. Asimismo, se ha aprobado un nuevo reglamento para la gestión del voluntariado