Otro desconchón al músculo del comercio histórico de Palma: el próximo miércoles, 15 de abril, cierra la Librería Ripoll. Su propietario, Manuel Ripoll, segunda generación al frente del comercio de libros antiguos, culpa a la crisis económica de la salomónica decisión de echar el candado.

Sant Miquel perderá otro negocio de raigambre local ya que la Librería Ripoll se asentó en esta vía en 1941, diez años después de su fundación por Tomás Ripoll Sastre, padrino del actual propietario, quien la abrió en la plaza Quadrado. El descendiente y bibliófilo tiene hijos pero no parece que ninguno de ellos quiera continuar con esta tradición familiar.

En los últimos años, Ripoll ha modernizado su escaparate, convirtiéndolo en un lugar digno de verse gracias a las postales antiguas o dibujos, siempre alusivos a temas concretos de cine, de navegación, de Palma, de las islas del Mediterráneo, de cocina, y otros temas más comerciales.

Pero lo fundamental de Ripoll es su fondo bibliográfico, algunos títulos de gran valor.