La Autoridad Portuaria de Balears y el ayuntamiento de Palma han decidido convertir parte del recinto de Marivent, la residencia oficial de los Reyes en Mallorca, en un aparcamiento temporal para 800 coches, que quedará situado en un terreno arbolado entre la gasolinera y la finca de Son Vent, donde habitualmente se aloja el rey Felipe VI cuando viaja a Mallorca y justo en el límite del área de seguridad del palacio.
Este verano a la seguridad real le encantará la idea genial de Cort y la Autoridad Portuaria de mantener 800 coches aparcados en permanente rotación junto a los muros del palacio. El policía que habitualmente está de guardia durante el mes de agosto bajo una sombrilla frente a la puerta de Marivent seguro que encontrará bellas palabras de agradecimiento.
El objetivo de ambas instituciones con esta medida singular es ofrecer una alternativa de estacionamiento a los vecinos del Paseo Marítimo durante los 20 meses que durarán las obras del futuro bulevar, trabajos que ya han empezado a levantar parte del pavimento de la vía, a provocar atascos y que supondrán la pérdida de mil estacionamientos. Aunque ofrecer aparcamiento en Marivent a un vecino que vive al lado del Auditòrium, frente al Oceanográfico o a un turista que se aloja en uno de los hoteles de la vía, no parece una solución demasiado trabajada ni mucho menos práctica. Todavía resulta poco habitual aparcar a dos kilómetros de casa, aunque Hila haga todo lo posible para que acabe sucediendo.
Las otras alternativas que se ofrecen a los ciudadanos son los aparcamientos que se habilitarán en el Muelle de las Golondrinas y en una zona interior miniatura situada entre las calles Joan Miró y Federico García Lorca. Así que mucha paciencia a los vecinos del Paseo Marítimo. Durante veinte meses toca caminar o sumarse al gran atasco.
