La COP26 de Glasgow ha mostrado que la política frente a la emergencia climática se encuentra en punto muerto. La intervención de lobbies con intereses privados, el cortoplacismo electoral y la falta de control de los ciudadanos sobre sus representantes ha resultado en un fracaso sistémico.

Desde Extintion Rebellion (XR) celebramos la noticia de que el Govern de les Illes Balears convocará una Asamblea Ciudadana por el Clima (ACC).

Una Asamblea Ciudadana (AC) es una herramienta democrática formada mediante un sorteo representativo de la población que cuenta con el asesoramiento de personas expertas. La AC sigue un proceso formal y mediatizado que favorece el aprendizaje y la deliberación colectiva. Sus conclusiones constituyen un programa que debe ser llevado a cabo por el gobierno.

Sin embargo, si no se cumplen determinadas garantías, puede resultar en decepción y desconfianza hacia un proceso que promete tomar decisiones de calidad.

XR es un movimiento internacional que denuncia la inacción de los gobiernos frente a la emergencia climática. Nuestra tercera demanda es superar las limitaciones del sistema político actual mediante las ACC, porque estas, tras veinte años de desarrollo, han demostrado ser la herramienta política más apropiada para problemas complejos, polarizantes y de largo alcance.

Desde 2018, XR ha realizado campañas de desobediencia civil no violenta que han impulsado la implementación de ACC en varios países. En España, el Ministerio de Transición Ecológica (MITECO) acaba de iniciar un proceso parecido que incumple garantías básicas.

Después de tres años de movilizaciones, aplaudimos la noticia de la ACC en las Illes Balears, mientras nos asalta la pregunta: ¿Cumplirá estándares de calidad?

De entrada, el diseño propuesto es netamente superior al del MITECO en cumplimiento de estándares: el sorteo estratificado se realiza sobre toda la ciudadanía. Además se remarca el interés en que el programa que emerja sea lo más vinculante posible.

Pero queremos realizar algunas aportaciones al diseño propuesto.

1) La ACC final al nivel de la comunidad autónoma saca representantes de cada asamblea insular. Por lo tanto, esta asamblea no se puede llamar AC si no utiliza otro sorteo estratificado del conjunto de la población.

2) Las sesiones están limitadas a un solo fin de semana para el proceso de aprendizaje, deliberación y elaboración de propuestas por cada tema. Se requiere más tiempo para tomar decisiones de calidad.

3) Las ACC deberían ser soberanas para citar a los expertos que quisieran aparte de los que proponga la comisión de coordinación para garantizar su independencia y legitimidad.

XR es un movimiento ciudadano que cuenta con expertos en el tema de las ACC. Pedimos interlocución directa con el Govern aportando nuestro conocimiento para que el proceso resulte en el mayor beneficio.

En los meses que siguen, XR velará para que la ciudadanía conozca el potencial de esta oportunidad para superar los retos futuros.

Quien quiera trabajar por abrir la democracia nos encontrará.