"El requisito del catalán a los médicos de Baleares es excluyente y disuasorio, porque exige a los médicos una acreditación lingüística y va a dificultar la contratación de profesionales en las islas, añadiendo este problema a otros como el alto nivel de vida de la comunidad y los elevados precios de los alquileres", ha asegurado Miguel Lázaro, presidente del Sindicato Médico de Baleares (Simebal).

Bajo el epígrafe de "Sanitarios obligados a hablar catalán", el Programa de Ana Rosa de las mañanas de Telecinco ha recibido hoy al presidente del Sindicato Médico de de Baleares para analizar en directo el acuerdo del pasado 1 de febrero por el cual se exigirá el requisito del catalán a médicos y enfermeros.

"La conclusión es que con este acuerdo se politiza la sanidad", ha afirmado Miguel Lázaro. "El Sindicato Médico lleva desde el año 2000 defendiendo que el catalán sea un mérito y no un requisito. Porque el problema no es la lengua catalana, que es algo precioso, sino la acreditación lingüística", ha explicado. "Sobre todo en un contexto sanitario en el que faltan 800 médicos de Atención Primaria y hospitalaria", ha subrayado. "Faltan oncólogos y cardiólogos en el hospital de Son Llàtzer, en Mallorca, e Ibiza funciona con un cardiólogo y medio", ha lamentado.

"En este panorama deficitario en el que captar y fidelizar médicos en Baleares es tan difícil -ha argumentado Miguel Lázaro en la entrevista de El Programa de Ana Rosa-, está claro que un requisito lo que hace es complicar más la gestión sanitaria, porque dificulta dotar a Baleares para que pueda ofrecer una prestación sanitaria con los estándares de calidad", ha asegurado Lázaro, que todavía ha ido un poco más lejos: "Hoy en día, por ejemplo, ponerse enfermo en Ibiza es un riesgo con el déficit de especialistas que hay".

Ante las preguntas de Ana Rosa Quintana, Miguel Lázaro ha continuado con su argumentación. "Las lenguas no tienen derechos, tienes derechos los ciudadanos", ha manifestado. "Yo soy psiquiatra y de Teruel, llevo más de treinta años en Baleares y no he tenido nunca ningún problema de comunicación con mis pacientes. Y puedo decir que en las islas los pacientes no tienen ningún problema para comunicarse con los médicos y estos tienen las suficientes competencias para comunicarse con ellos sin problemas, como lo demuestra que en solo un año solo se hayan producido 200 quejas en toda la administración autonómica", ha sostenido, defendiendo que no se trata de un problema real, sino político, un problema entre Més y PSOE", ha matizado.

"La presidenta Armengol defendió que la salud prevalecía sobre la lengua, pero al día siguiente y, por presiones políticas rectificó", ha dicho Lázaro. "Por eso digo que el requisito pone más dificultades a los ciudadanos de Baleares para acceder a una sanidad pública de calidad", ha defendido Lázaro.