Lo de Ramón Tamames está dando mucho juego. Desde que se ha sabido que Vox le ofrece capitanear una moción de censura y ser alternativa como presidente de Gobierno, ha concitado gran atención en las cadenas.
El foco del análisis ha sido doble: por un lado, cachondeo por los años que tiene (va a cumplir 90 en diciembre) y por otro, la trasmutación de sus ideas. ¿Cómo puede ser que el Tamames que fue miembro de la Ejecutiva del Partido Comunista (1976) y fundador de Izquierda Unida (1986) sea el mismo Tamamames que ahora flirtea con Vox?, se han preguntado esta semana en el telehipódromo. La mayor socarronería se la han dedicado en ‘El intermedio’ (La Sexta). Decían: "Por edad no puede presentarse al Benidorm Fest, pero es perfecto para el Benidorm Imserso". Y le cantaron aquella canción de Nino Bravo, ‘Noelia’, cambiando las estrofas: "Ha olvidado de dónde viene, y hace tiempo que no sabe adónde va". De las muchas entrevistas que le han hecho esta semana en la tele, la de Xabier Fortes el otro día en ‘La noche en 24 horas’ (TVE) fue la más definitoria.
Tamames declaró que no es partidario de ilegalizar los partidos ‘indepes’, y que "cerrar el grifo a la inmigración sería condenarnos a una despoblación acelerada». Después de estas afirmaciones se preguntaban los allí reunidos, entre maravillados y pasmados, cómo puede estar atendiendo la llamada de Vox, si no comulga con el ideario de la extrema derecha. Estaba en la mesa nuestro compañero Juan Cruz y recordó con justicia y justeza que Tamames fue fundador de 'El País', y miembro de su consejo de administración.
Fortes, en un momento dado, le preguntó si le molesta que le digan que es mayor para ser presidente del Gobierno. ¡Ah! Esto de la edad suele generar siempre mucha chirigota en la tele. Ayer en ‘Està passant’ (TV-3) comentaba Toni Soler los años de inhabilitación que le pueden caer a Laura Borràs si la condenan. Decía: "No se podría presentar a una elecciones hasta que tuviera 73. Con esa edad solo podría aspirar a la alcaldía de Barcelona". Lo que decíamos: la tendencia socarrona sobre la edad en la tele. Discrepo. Ni los 89 de Tamames ni los 76 de Trias ni los casi 80 del ‘Tete’ Maragall, ni Borràs si tiene que esperar a los 73, son argumentos que puedan usarse como descalificación. No es la edad, son las ideas las que avalan, o desacreditan, a cualquiera.
