Mar y montaña es de lo mejor que puedes encontrar en la isla. Disfrutar el Patrimonio Mundial de la Humanidad de la Serra de Tramuntana, es uno de los mejores planes de fin de semana, y si encima es con la brisa del mar en la cara, empiezas el lunes mejor que nunca.

La ruta de los miradores

Para intrépidos sin vértigo acostumbrados a caminar. Una ruta larga que te dejará sin aliento ante las panorámicas que vas descubriendo a cada paso. Playas, caminos, casas con historia como S´Estaca y miradores llenan un itinerario de casi cinco horas. Cámara en mano, un buen bocadillo y mucha agua son los requisitos para esta excursión, ¡y buenos zapatos!

Sa Costera

Si no eres amateur del excursionismo, tienes esta ruta de dificultad media, de unas cuatro horas de duración. El camino empedrado te avanzara por tierras de marjades, para abrirte camino hacia casas y bosques. Un desnivel para llegar al coll de Biniamar, para iniciarte en el camino de Sa Costera que te llevará hasta Cala Tuent. Aprovecha un día de sol, y hacer el primer baño valiente del año.

De Son Olesa a Banyalbufar por el Port des CanongeDe Son Olesa a Banyalbufar por el Port des Canong

Cálzate unos zapatos cómodos para caminar horas, y prepara tus pulmones para respirar aire fresco. Empiezas por un camino asfaltado en las casas de Son Olesa, para adentrarte poco a poco en un camino de herradura envuelto de vegetación, que te permitirá ver los lugares más espectaculares de la Serra de Tramuntana. A partir de ahí, te iniciarás en el camino de la Cova que te llevará a tres lugares donde te podrás bañar, playa de l´Hort de la Cova, Playa de Bunyola y Port des Canonge, para acabar con la Volta des General.

El camí de Sa Marina de Valldemossa

Antes de ponerte a caminar, te recomendamos que llenes el estómago con una coca de patata y un chocolate, o te reservas para la vuelta. Una excursión fácil que dura poco más de una hora, sólo ida. Una ruta que conecta las possesions de Son Ferrandell y Son Olesa con el puerto de Valldemossa. Un camino empedrado que te dejará ver Sa Marina desde lo alto y Sa Foradada a lo lejos, mientras disfrutas de la vegetación de la Serra. Una vez llegas al puerto de Valldemossa, puedes caminar un poco más para encontrar uno de los terrenos más antiguos de la isla, Sa Cadireta, situado entre Sa Marina y el Port des Canonge.