Hace diez años, el 12 de octubre de 2012, se estrenó en Estados Unidos la película más terrorífica de la historia. El 31 de octubre, Halloween, llegó a salas españolas. Esa película es 'Sinister' (2012), del estadounidense Scott Derrickson ('Black Phone'), y, aunque el miedo es muy subjetivo, en las encuestas sobre la película de terror que da más miedo de la historia suele ser la primera. Inspirada en un sueño del guionista C. Robert Cargill, 'Sinister' cuenta la historia de un escritor (Ethan Hawke) que se instala con su familia en una casa donde tuvo lugar un suceso terrible. Al poco tiempo, encuentra una caja con unos vídeos domésticos de contenido espeluznante y se obsesiona con averiguar qué hay tras ellos.

La historia no es muy original, pero Derrickson y Cargill partieron de ahí para levantar una película cuya capacidad de aterrar no se puede descifrar del todo. El director J. A. Bayona ('El orfanato', 'Jurassic World: El reino caído') lo explica muy bien: “Aunque tampoco es fácil, cuando haces una película de terror puedes aspirar a una atmósfera inquietante, a una escena perturbadora, con suerte, a una imagen medianamente icónica. Pero conseguir lo que consigue Derrickson en 'Sinister', además de todo eso, es dificilísimo: llega al hueso del terror, hace una película que da realmente miedo. Eso pasa muy pocas veces”.

"Derrickson llega al hueso del terror, hace una película que da realmente miedo. Eso es difilísimo"

J.A. Bayona

Quemado por su experiencia con 'Ultimátum a la Tierra' (2008), Derrickson rodó la película con un presupuesto pequeño, equipo reducido y muchas dificultades. Pero hizo la película que quería. Así lo cuenta en el medio digital SlashFilm, en el que Ryan Scott ha publicado recientemente una extraordinaria historia oral de la película: “Para mí fue la experiencia cinematográfica más pura que alguien puede tener porque no estaba pensando en el éxito de la película. Estaba pensando en hacerla buena, hacerla realmente aterradora, convertirla en la película de terror que desearía ir a ver al cine”. Contra todo pronóstico, fue un éxito internacional: costó tres millones de dólares y recaudó 82. ¿Por qué da tanto miedo? ¿Porqué sigue asustando a tanta gente?

La escritora Mariana Enriquez ('Nuestra parte de noche') recuerda así la primera (y última) vez que la vio: “La vi en un pase de prensa por la mañana en Buenos Aires en un cine muy chiquito con otros críticos, y me estaba muriendo de miedo. Las películas caseras, las expresiones de los chicos, el ambiente en general… Es súper trillada la idea de ir a la casa donde hubo un crimen y, sin embargo, hay algo en cómo lo filma y lo cuenta que me hizo morir de miedo. No sé, nunca pude entender del todo qué es lo que hace que esa película de tanto miedo. No la volví a ver porque quiero conservar esa sensación tan vívida. De hecho, la estoy pensando en este momento y recuerdo la cara de Ethan Hawke horrorizado mirando las películas y yo me siento así”.

"Es súper trillada la idea de ir a la casa donde hubo un crimen, pero hay algo en cómo lo filma y lo cuenta que me hizo morir de miedo"

Mariana Enríquez

Imágenes que alimentan pesadillas

Los cineastas y escritores entrevistados para este artículo coinciden en el misterio de sus imágenes, especialmente las de los vídeos domésticos. Son imágenes invadidas por el pesar y espeluznantes. Es difícil verlas y, aún más, olvidarlas. “'Sinister' tiene la capacidad de generar imágenes perturbadoras icónicas, fotogramas que pasan a formar parte de tu acervo pesadillesco. Todo el 'found footage', como lo del cortacésped, es algo que nunca olvidas. Es una gran película. Y, encima, quitas el terror y sigue dando mucho miedo porque es la historia de un tío que por ambición pone en riesgo a su familia”, explica el director Paco Plaza ([REC], 'Verónica').

Es cierto que 'Sinister' es también una historia tremenda de obsesión y codicia. La cineasta Alice Waddington ('Paradise Hills') lanza una interpretación interesante de esa dimensión del filme: “'Sinister' es una manifestación del terror gótico que conecta de forma consciente con los períodos de fijación en que inevitablemente entramos los escritores al investigar temas dolorosos o complejos. Más allá de los horrores de las cintas; es un cuento cautelar podrido sobre el ego implícito en narrar historias sobre el dolor ajeno para lograr el éxito propio”.

“'Sinister' tiene la capacidad de generar imágenes perturbadoras icónicas, fotogramas que pasan a formar parte de tu acervo pesadillesco"

Paco Plaza

Frecuencia cardiaca

La revista 'Forbes' publicó hace dos años un artículo en el que informaba de un estudio, llamado Science of Scare Project y realizado por la plataforma broadbandchoices para determinar cuál era la película más terrorífica de la historia. Para llevarlo a cabo, rastrearon con dispositivos la frecuencia cardíaca de cincuenta personas de distintas edades que vieron más de cien horas de películas de terror. El promedio de la frecuencia cardíaca más alta de los espectadores fue con 'Sinister', película con la que aumentó un 32 %.

El director Jaume Balagueró ('[REC]', 'Venus') tiene una anécdota que podría subir aún más ese porcentaje: “Fui a ver 'Sinister' en una sesión nocturna del festival de Sitges. Mi sobrina y mi hija, que tenían 12 o 13 años, me preguntaron si podían venir. Les dije que claro, que vinieran. Les expliqué cómo volver al hotel por si les daba miedo y decidían salir antes, pero me dijeron que no haría falta: ‘¡Aguantamos, seguro que aguantamos!’. Empieza la película y aparece un árbol con una familia colgada. Mi sobrina y mi hija se levantaron y se fueron. Aguantaron dos segundos”.